El estoc de viviendas vacías en España se reduce, aunque muy lentamente. A mediados del 2018 todavía existía un parque de 500.000 pisos sin vender, según el informe 'Evolución Reciente del mercado de la Vivienda en España", que incluye el último Boletín Económico del Banco de España. El informe que recoge la evolución del mercado desde el 2013, pone de manifiesto que los niveles de demanda (viviendas transmitidas) superan claramente al de la nueva oferta (viviendas terminadas), de forma continuada, Lo que se habría traducido "en una lenta, aunque progresiva", absorción del volumen de casas sin vender. Ese medio millón, no obstante, resulta una cifra muy difícil de digerir, ya que en el 2017, el estoc no era mucho mayor.

El Banco de España destaca asimismo que la lenta corrección del parque podría estar reflejando, "un cierto desajuste entre las características de las viviendas demandas --entre las que se encuentra la localización-- y las de las viviendas disponibles para la venta. Lo cierto es que el parque sin vender se acumula en las zonas en las que la demanda es menor.

Pese a ello, la actividad del sector muestra una clara recuperación con respecto a los años de la ciris, que comenzó a notarse en el 2014 y que ha permitido que en el 2018 se alcanzaran algo más de 550.000 compraventas de viviendas, aproximadamente, un 10% más que en el 2017, aunque menor que las que se realizaban en el periodo de expansión. El promedio anual entre el 2004 y el 2007 era de 885.000 compraventas.

El informe destaca que los precios de la vivienda, tras un intenso ajuste sobre la crisis, han registrado un avance del 27% entre el inicio del 2014 y finales del 2018. Se trata de una incremento que coincide con el alza de la iniciación de proyectos de obra nueva residencial, "aunque con cierto retraso, posiblemente por el elevado estoc de vivienda sin vender, como consecuencia del incremento de la oferta durante la anterior fase expansiva", que no fue absorbido en la crisis, dada la debilidad de la demanda en ese período.

MERCADO HETEROGÉNEO

El Banco de España pone de manifiesto la heterogenidad del mercado. Así el precio de la vivienda ha evolucionado de forma diferente en función de las comunidad autónoma de que se trate. "Aunque en todas ellas se observa la tendencia general al alza de los precio". Así, Madrid registra un avance del 49% y Catalunya del 39%, mientras que la media española ha sido del 20% en el mismo periodo. De igual forma, las mismas comunidades --sumada Andalucía y Valencia-- reflejan el mayor dinamismo por lo que se refiere a las viviends visadas. "Han producido una recuperación del número de viviendas visas superior al 200%", señala el informe.

Otro elemento que marca la heterogeneidad esta relacionado con las transacciones según tipo de vivienda. Las compraventas se han visto sostenidas por el segmento de vivienda usada, mientras que las de vivienda nueva muestran una trayectoria de ligero descenso. La participación de los compradores extranjeros, principalmente los procedentes del Reino Unido, ha contribuido a la recuperación del mercado, en tanto que han crecido un 16% en el periodo mencionado, frente a un promedio del 10% en el que va del 2007 al 2013.

VIVIENDA DE ALQUILER

La proporción de la población en situación de alquier en España es reducida. Si bien, los hogares en régimen de arrendamiento han pasado del 14,2% en el 2008 al 16,9% en el 2017. Ese aumento, en parte, se debe a la población de entre 16 y 29 años y al grupo de 30 a 44 años que han sido dirigidos a ese mercado, sobre todo, por causas económicas. Las condiciones del mercado laboral, no solo ha aumentado el paro entre esos grupo de población sino que también han generado una caída de los ingresos. "La ganancia media cayó entre el 2008 y el 2016 un 15% para los trabajadores de entre 20 y 24 años y un 9% para aquellos entre 25 y 29 años".

Los jóvenes vieron también como se deterioraban otras condiciones laborales. Para los trabajadores de entre 16 y 29 años, la tasa de paro alcanzó el máximo del 42,4% en el 2013, con una incidencia del apro de larga duración del 52,1% en el 2014. En el 2018, estos indicadores ya eran algo menos negativos.

Todo ello, no ha impedido un incremento significativo de las rentas del alquiler. El Banco de España menciona un incremento del 9,3% en el 2018 y utiliza como fuente el portal inmobiliario Idealista. No obstante, esa subida, representa un cierto enfriamiento con respecto a la subida del 18,4% registrada un año antes.