El endeudamiento de las familias españolas en relación a su renta bruta disponible se ha duplicado en la última década, pasando del 45% a principios de los noventa hasta alcanzar el 90% con los últimos datos disponibles, según refleja el estudio sobre Evolución reciente del patrimonio de empresas y familias en España: Implicaciones macroeconómicas elaborado por el director general del Servicio de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina.

Con este incremento, los hogares españoles, que partían de un grado de endeudamiento muy inferior al de la media de los países de la zona euro, la ha sobrepasado en muy breve espacio de tiempo, aunque mantienen todavía registros considerablemente menores a los de Estados Unidos o el Reino Unido.

Según el estudio del Banco de España, los cambios del comportamiento financiero de las familias durante la última década se insertan en un contexto macroeconómico muy favorable a las decisiones de gasto de los hogares, como consecuencia de los efectos inducidos por el proceso de incorporación a la Unión Monetaria que aunaron mejoras en la renta esperada, abaratamiento de los costes de financiación e incremento de la riqueza.

La tasa de ahorro mostró una tendencia descendente durante la segunda parte de la década que llevó a un mínimo ligeramente superior al 9% de la renta bruta disponible durante 2001.