la farmacéutica española Grifols está ejecutando un plan de inversiones de 1.400 millones de euros hasta 2022 para incrementar su capacidad de producción de hemoderivados. El 66% de esta partida se destinará a la división de bioscience, que es la encargada de producir los medicamentos plasmáticos, y el objetivo de la multinacional es poder fraccionar 19 millones de litros de plasma -7 millones más que actualmente- dentro de tres años. Para lograrlo, Grifols abrirá o incorporará 60 centros de donación de plasma -hasta los 316 recintos- durante el periodo 2019-2022 y pondrá en marcha diversas plantas productivas de purificación y fraccionamiento.

«La demanda de medicamentos hemoderivados es más alta que la oferta, por este motivo es clave aumentar nuestra capacidad industrial», valoró Víctor Grífols Deu, co-consejero delegado de la compañía. Otro de los ejes estratégicos de Grifols es su fármaco contra el Alzheimer, que actualmente se encuentra en fase de ensayo clínico. El estudio trata de demostrar que es posible detener la evolución del Alzheimer combinando la extracción periódica de plasma y sustituyéndolo por una solución de albúmina, una proteína plasmática.