El grupo maderero Finsa tiene grandes planes para sus dos fábricas de Cella (Teruel). La compañía va a invertir hasta finales del 2020 más de 75,5 millones de euros en modernizar y ampliar las dos plantas que tiene en la localidad turolense. La mayoría de este presupuesto estará destinado al incremento de la competitividad y la sostenibilidad, además de a mejoras en eficiencia energética, infraestructuras, calidad del producto, industria 4.0 y prevención de riesgos laborales.
Este plan de expansión permitirá la creación de 50 nuevos puestos de trabajo que se sumarán a los casi 400 empleados que ya forman el equipo de estas dos plantas. También incrementará el número de trabajadores de empresas de servicios auxiliares, que durante la fase de montaje alcanzará las 100 personas, más del doble de las que colaboran habitualmente.
Las fábricas, que llevan más de 40 años en la provincia aunque por su accionariado han pasado varias firmas, se dedican a la fabricación, empaquetado y distribución de kits de muebles, así como a la producción de tableros aglomerados para soluciones decorativas o suelos laminados.
La consejera de Economía, Marta Gastón, visitó ayer las plantas y puso a disposición de la empresa «todas las herramientas con las que cuenta el Gobierno de Aragón para promotores de iniciativas que generen riqueza». Entre ellas, figura la declaración de interés autonómico, que permitirá reducir los plazos administrativos a la mitad; la convocatoria del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) para inversiones generadoras de empleo; y posibles acuerdos de formación con compromiso de contratación o la nueva formación profesional laboral dual para jóvenes de hasta 35 años, además del resto de herramientas con las que cuenta el Inaem.
El plan de expansión que Finsa ha diseñado para Cella incluye la modernización de las instalaciones, un aumento de la capacidad de producción y la incorporación de nuevas líneas de fabricación «más adecuadas al mercado actual», según destacó el director de la fábrica de Cella, Eduardo Rojo.
PRESENCIA EN 80 PAÍSES / Finsa se ha posicionado como uno de los principales fabricantes de tablero de la península ibérica. Con más de 80 años de historia, presencia en 80 países y 3.250 trabajadores en plantilla, este grupo cerró el 2017 con una facturación de 870 millones de euros.
Los tableros fabricados en las plantas de Cella se comercializan en firmas como Leroy Merlín o el Corte Inglés y decoran las tiendas de Inditex.
