El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó ayer sus previsiones de crecimiento económico en el 2004 para la zona euro al 2%, frente al 1,75% fijado en abril. No obstante, el organismo avisó de que persisten dudas sobre la vitalidad de la economía a largo plazo, e insistió en la necesidad de reformas estructurales para incrementar el volumen del empleo y ayudar a la continuidad de los sistemas de seguridad social, y consolidar la demanda interna.

El Fondo prevé también que la inflación se mantenga con un 1,9% previsto para este año.