La consejera de Economía, Industria y Empleo, Marta Gastón, explicó ayer en Huesca a los medios de comunicación la trascendencia de acuerdo suscrito el pasado viernes con el grupo agroalimentario Guissona para impulsar la expansión nacional de Bon Àrea desde el gran centro de producción y suministro que se construirá en Épila. De hecho, elevó a 10.000 los empleos directos e indirectos que se podrían generar.
Según explicó, el refuerzo mutuo de la logística la industria agroalimentaria y sector primario puede crear en total alrededor de 10.000 empleos, ya que a los 4.000 directos en el complejo de la localidad zaragozana habrá que añadir unos 5.000 productores asociados en agricultura y ganadería y otros 1.000 empleos en las nuevas tiendas de la red Bon Àrea que surgirán en torno al proyecto y distribuirán su producción.
La llegada de Guissona, como dijo el presidente Javier Lambán, equivale a «la Opel de la industria agroalimentaria», recordó Gastón, que consideró que se ha conseguido sacar adelante el proyecto poniendo en valor «la gran potencialidad y la idoneidad de Aragón» como base para el crecimiento del grupo y con todo el respaldo de la comunidad.
«La decisión de Bon Àrea de apostar por Aragón para impulsar su expansión nacional ha sido posible gracias a un trabajo discreto y continuo que ha sentado las bases precisas para convencer de que Aragón es el mejor lugar para crecer», destacó la consejera.
