Uno de los principales y más publicitados objetivos del Plan de Choque por el Empleo Joven 2019-2021 que aprobó ayer el Gobierno es reducir hasta en 10 puntos las elevadas tasas de paro entre los más bisoños. No obstante, no es la falta de trabajo el único mal que aqueja a los jóvenes, sino que la temporalidad o las condiciones precarias también están más presentes entre estas franjas de edad.

Lo ha destacado la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, durante la presentación oficial del plan. "La tasa de estabilidad laboral es del 8,2%, algo muy preocupante", ha declarado. De esa necesidad surge uno de los más exigentes objetivos que se ha marcado el Ejecutivo de Pedro Sánchez con este plan. Crear 2,9 millones de puestos de trabajo indefinidos en los próximos tres años. Es decir, casi un millón de contrataciones indefinidas anuales.

¿Cómo piensa el Gobierno facilitar la firma de esos contratos indefinidos? Una de las vías serán, de una manera no muy diferente a la existente hasta la fecha, los incentivos a las empresas para ofrecer dichos contratos. El Ministerio de Trabajo "evaluará y revisará" dichos incentivos para eliminar "los que se hayan revelado ineficaces". De 2.000 millones de presupuesto que incluye el plan, 38 están destinados directamente a incentivar el compromiso a la contratación indefinida y 360 millones a programas mixtos de formación y empleo.

También extenderá aquellos que funcionen a las empresas que practiquen o decidan reconvertirse bajo el paraguas de la economía social. Un sector al que el Gobierno atribuye un "potencial para crear empleo de calidad" y que incentivará especialmente en aquellas poblaciones de 5.000 habitantes o menos. Para los proyectos en medios rurales están asignados 75 millones de euros.

Si bien con los incentivos Pedro Sánchez se pone el guante de seda, reforzando la Inspección de Trabajo no renuncia al de hierro. El Plan de Choque por el Empleo Joven se coordinará con el ya vigente Plan Director por un Trabajo Digno para perseguir aquellos contratos temporales que no puedan justificar el no ser indefinidos. Actualmente el Ejecutivo ya ha asignado fondos específicos para que los inspectores realicen horas extras para combatir la temporalidad y parcialidad no justiticadas.

MÁS AUTOEMPLEO

El plan del Gobierno no fía toda la creación del empleo de calidad en el trabajo asalariado, y es que un paquete de medidas muy nutrido está enfocado al trabajo autónomo. Las incubadoras que ya están funcionando, muchas de ellas impulsadas o financiadas desde instituciones del territorio, jugarán un papel clave. El documento del Gobierno cita que mientras que el "47% de las empresas creadas en España cierran apenas 2 o 3 años después de su creación, el 80% de aquellas Startup que han nacido bajo el abrigo de alguna de las mejores incubadoras del país logran sobrevivir".

El fomento del trabajo autónomo es uno de los que más presupuesto se lleva de todo el plan, ya que entre las bonificaciones y la formación del emprendimiento se destinan 426 millones en tres años.