La compañía norteamericana Google ha aceptado dejar de ocultar en las búsquedas de productos y servicios (hoteles, restaurantes) a los proveedores de servicios competidores suyos para evitar una sanción multimillonaria de la Comisión Europea por abuso de posición dominante, según anunció ayer el comisario de Competencia, Joaquín Almunia. El comisario calificó de "satisfactorio" el acuerdo alcanzado tras más de tres años de complejas negociaciones, aunque los competidores del gigante norteamericano estimaron el compromiso insuficiente.

Google se ha comprometido a mostrar bien visibles de los resultados de las búsquedas de productos y servicios las ofertas de tres de sus competidores más populares junto a sus propias recomendaciones. Si las ofertas de Google llevan imágenes, las ofertas de los competidores también deberán tener imágenes, precisó Almunia. De este modo, cuando un usuario pida a un producto concreto, en la parte superior de la búsqueda de Google, junto a las recomendaciones de compra del propio buscador, aparecerán tres alternativas igual de visibles de otros competidores. Si el usuario pide por ejemplo un hotel o un café en una ciudad determinada, junto a las recomendaciones de Google aparecerán tres proveedores de servicios alternativos, como Vía Michelin, Páginas amarillas o Resto. be en un ejemplo belga. Además, Google ha aceptado renunciar a los contratos de exclusividad de publicidad con los editores.

El acuerdo tendrá una vigencia de cinco años y se aplicará en toda Europa. El cumplimiento de los compromisos estará supervisado por un comité de vigilancia independiente elegido por la Comisión Europea, explicó Almunia. Frente a las críticas de los competidores, el comisario señaló que "no es lógico que se pida a Google que trate a sus competidores exactamente igual", sino de lo que se trata es de "evitar comportamientos abusivos" como el relegar muy atrás en las búsquedas a los servicios de la competencia.

Almunia indicó que en las próximas semanas tiene previsto decidir si abre o no una investigación formal contra Google por abuso también de posición dominante por su sistema operativo para teléfonos móvil Android. La Comisión Europea además está investigando las denuncias de los editores de prensa contra Google por violación de los derechos de propiedad intelectual al difundir sus textos sin su acuerdo y las denuncias por no respetar los derechos de privacidad de sus usuarios.