Los grandes empresarios de Aragón recelan de las primeras medidas de política económica que ha anunciado el nuevo Gobierno del socialista Pedro Sánchez. En concreto, las subidas fiscales o el destope de las cotizaciones sociales, ya que «no favorecen la creación de empleo y el crecimiento», advirtió ayer Ricardo Mur, presidente de la Consejo Empresarial de CEOE Aragón, que está integrado por 24 de las principales compañías ubicadas en la comunidad. «Hay que ajustar el déficit público pero no solo por la vía de incrementar los impuestos y la recaudación, que es lo que parece que hay», apuntó.

La visión crítica de los grandes empresarios se dejó entrever con motivo de la Cumbre por la Competitividad de Aragón, organizada por la patronal aragonesa y el citado órgano empresarial. El foro, celebrado en el Edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza y que alcanzó su tercera edición, contó con una nutrida participación de agentes económicos de la comunidad, así como dirigentes políticos como el presidente aragonés, Javier Lambán, y la consejera de Economía, Marta Gastón.

«Los empresarios estamos igual de preocupados hoy que hace un mes y estamos trabajando para tratar de generar empleo y mejorar nuestras cuentas de resultados, pero hay medidas que pueden perjudicar al crecimiento», respondió Mur al ser preguntado por si hay preocupación por el cambio de Gobierno. En este sentido, confió en que el nuevo Ejecutivo «sea lo más estable posible para desterrar cualquier incertidumbre desde el punto de vista macroeconómico».

Subir salarios

Sobre el pacto salarial firmado ayer en Madrid entre patronales y sindicatos, el también presidente de CEOE Zaragoza consideró que es una «muy buena noticia» que llega tras más de dos años de negociación, al tiempo que abogó por subir los salarios pero «sin dañar la competitividad de las empresas», ya que este factor es «clave», dijo, para seguir generando empleo.

Mur destacó asimismo los avances logrados dese la celebración en el 2016 de la primera Cumbre por la Competitividad, creada para poner en valor los esfuerzos que desde el ámbito de la empresa aragonesa se están realizando para mejorar las oportunidad de inversión, crecimiento y empleo de la comunidad. Entre los avances alcanzados, destacó la «unidad de acción» en la reivindicación de infraestructuras públicas, sobre todo en materia ferroviaria para el impulso del transporte de mercancías. Pese a ello, subrayó que «si en Aragón todos estuviéramos mucho más unidos, avanzaríamos más rápido». En cuanto a los deberes pendientes, aludió el incremento del tamaño de la empresas y su internacionalización.

La III Cumbre por la Competitividad estuvo centrada en los tres sectores llamadas a ser los puntales del «Aragón del futuro», explicó Mur, como son el automóvil, la energía y la agroalimentación. En el primero, la comunidad se enfrenta al reto de liderar la movilidad eléctrica, mientras que en el segundo se va a posicionar como una potencial nacional en renovables. Y por último, la tercera actividad supone una oportunidad para generar riqueza y empleo en el medio rural. En representación de estos sectores, el foro contó con la intervención del vicepresidente de Anfac, Mario Armero, el director general de Endesa Aragón, Ignacio Montaner, y la directora de Comunicación de Tervalis, Camino Ibarz.

Premio a Amado Franco

La clausura de la cumbre corrió a cargo de Lambán, quien resaltó el crecimiento de la comunidad y señaló los «principales desafíos» que forman la «agenda de la competitividad» de Aragón, como incrementar la inversión en I+D+i, ampliar la superficie esquiable para competir en la «liga europea» de las estaciones o mejorar las comunicaciones ferroviarias. «Es necesario hacer una economía cada vez más innovadora, aunque sujeta siempre a los parámetros de la sostenibilidad», afirmó.

En el acto también se entregó el Premio Empresario de Aragón al presidente de la Fundación Ibercaja, Amado Franco, quien se mostró «orgulloso» de haber contribuido al «progreso de esta tierra» y a fomentar la colaboración público-privada.