El Gobierno central baraja una reducción de los módulos con los que los autónomos de los sectores agrícola y de transportes estiman los rendimientos de su negocio para el impuesto sobre la renta (IRPF). La medida forma parte de las alternativas barajadas para paliar los efectos del encarecimiento del gasóleo, según fuentes de la Secretaría de Estado de Hacienda. No se descartan recortes de cuotas de la Seguridad Social.

Un retoque a la baja de los módulos, cuya orden se publicará el próximo mes de noviembre, permitiría extender a un colectivo más extenso que los agricultores las medidas para amortiguar la subida del gasóleo. Pero los agricultores juzgan insuficiente esta ayuda y reclaman iniciativas como la del Gobierno francés, que ha rebajado el gasóleo agrícola, aunque de forma transitoria para las compras efectuadas entre julio pasado y el próximo diciembre. Los apoyos a este sector se discutirán durante el Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea que se celebrará el lunes.

Los transportistas llevan años exigiendo un gasóleo profesional, con las mismas características que el destinado a usos agrícolas. Los impuestos sobre el gasóleo general alcanzan cerca del 60%, mientras que los que recaen sobre el agrícola (gasóleo B) suponen el 33% del precio.