El Grupo Ibercaja obtuvo hasta septiembre un beneficio neto de 356 millones de euros, 342 millones más que en el mismo periodo del 2013, cuando la entidad que integra también a Caja3 registró un resultado de 13 millones de euros. En cuanto al beneficio bruto, Ibercaja registró un resultado antes de impuestos de 498 millones de euros en estos primeros nueve meses del año frente a los 6 obtenidos hasta septiembre del año pasado, según comunicó ayer la entidad aragonesa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

En una nota de prensa, Ibercaja argumentó que este resultado supera ampliamente el de un año antes porque el ejercicio estuvo marcado por el impacto del saneamiento de activos realizado tras la adquisición de Caja3 y las modificaciones normativas. Asimismo, la entidad aragonesa resaltó el incremento del resultado operativo bancario impulsado por la estabilización del margen de intereses, el aumento de los ingresos procedentes de la gestión de productos de intermediación y la contracción de los costes recurrentes.

CAPTAR CLIENTES Ibercaja ha centrado su labor comercial en la captación de clientes, potenciando la actividad con empresas, fundamentalmente pymes, y particulares, que ha tenido como resultado el crecimiento de los recursos de la red minorista hasta los 48.116 millones de euros, un 4,74% más que hace un año, de forma que la cuota de mercado del grupo se ha elevado 5 puntos básicos en doce meses. Los recursos en balance se han incrementado un 1,39% y los de fuera de balance, como fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de vida, un 11,84%.

Ibercaja destacó que la cartera crediticia se eleva a 36.625 millones de euros y que la contracción en un año del 6,27% se enmarca dentro del desapalancamiento del sector privado y la reducción de la exposición a promoción inmobiliaria, si bien el descenso ha sido inferior al del sistema, por lo que mejora su cuota de participación en el mercado nacional.

Aislando la ralentización estacional que se produce en el tercer trimestre, el ritmo de formalizaciones de crédito muestra "señales positivas" para la entidad, ya que en los nueve primeros meses del año el volumen suma 1.987 millones. Asimismo, el grupo mantiene una holgada posición de liquidez y una reducida dependencia de la financiación mayorista.

Los gastos de explotación han bajado un 3,20% por la optimización de costes y captura de sinergias en el marco de la integración de Caja3, un descenso aún mayor, del 5,78%, si se aisla el efecto extraordinario del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) al que podrán acogerse voluntariamente hasta 375 empleados, con un coste de 32,5 millones, añadió la entidad.

Las provisiones para insolvencias y otros saneamientos, 157 millones, se sitúan en términos inferiores a los del pasado ejercicio, cuando se afrontaron dotaciones extraordinarias muy elevadas derivadas de la adquisición de Caja3 y de la aplicación de los nuevos criterios sobre refinanciaciones. La ratio de morosidad del grupo es del 10,86%, un 17% inferior a la del sistema --sin tener en cuenta la actividad inmobiliaria, la mora se reduce hasta el 6,28%-- y el grado de cobertura total sobre los riesgos dudosos llega casi al 56%, un "sólido nivel que es consecuencia del esfuerzo realizado en dotaciones en los últimos ejercicios".