Iberia quiere reducir más plantilla. La compañía anunció ayer el inicio de un proceso de despidos colectivos mediante la puesta en marcha de un expediente de regulación de empleo (ERE) voluntario, con el objetivo de reducir la plantilla en hasta 1.581 personas.

El grupo propietario de la aerolínea, IAG, informó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) del inicio de negociaciones para alcanzar su objetivo. La compañía informó también a sus empleados y representantes sindicales acerca de su intención de iniciar un periodo de consultas en relación con este ERE, que se suma al que está actualmente en vigor hasta el 2015 y que afecta a 3.141 empleados, de los que ya han abandonado la empresa tres cuartas partes.

PLAN DE TRANSFORMACIÓN En el comunicado a la CNMV, el grupo aéreo propietario de Iberia, British Airways y Vueling explicó que el nuevo ERE es una opción que fue discutida como parte de las negociaciones de los convenios colectivos con los sindicatos de la aerolínea el pasado mes de abril. Todas estas medidas forman parte del continuo plan de transformación de Iberia que persigue introducir cambios estructurales permanentes en todas las áreas de negocio de la compañía, con el fin de que pueda crecer de forma rentable en el futuro, de acuerdo con la nota de la matriz.

El presidente ejecutivo de Iberia, Luis Gallego, aseguró recientemente que los acuerdos con los representantes sindicales contemplaban la negociación de un nuevo ERE con carácter voluntario por ambas partes, con el objetivo de lograr una plantilla más ajustada al tamaño de la flota que tiene ahora la aerolínea. Según el directivo, es cierto que, quitando los negocios de mantenimiento y hándling, el número de empleados que Iberia tiene por avión sigue siendo más elevado que el de sus competidores, con lo cual hay que seguir trabajando en ello.

Dada la repercusión del plan en la productividad, los sindicatos admitían en marzo, cuando se sellaron los acuerdos con los tres colectivos de la compañía, que podía haber un excedente de plantilla, que se abordaría de forma voluntaria, con jubilaciones y recolocaciones diferidas que afectarían en torno a unos 2.500 trabajadores.

SALIDAS POR DEFINIR "Si el mercado se estimula y esto empieza a tirar no hace falta sacar plantilla sino contratar, pero yo creo que estamos aún lejos de eso", por lo que la compañía necesita un nuevo instrumento para cuando se agote en el 2015 el ERE en vigor, apuntó Gallego con motivo de la reapertura de la ruta Madrid-Estambul. Matizó que una vez iniciada la negociación del nuevo ERE se evaluará cuál es el máximo de personas que podrían dejar la plantilla.