La volatilidad definió ayer la evolución de los mercados como consecuencia de la crisis del rublo y la caída del precio del petróleo a 60 dólares. El Ibex 35 llegó a estar por debajo de los 9.600 puntos y, sin embargo, cerró en los 10.081, con un 1,80% de revalorización. Todo hacía pensar que la renta variable recibiría un nuevo golpe bajista. La caída del petróleo no cesa ni los efectos sobre el mercado de Rusia. El rublo sigue en caída libre a pesar del fuerte incremento de tipos llevado a cabo por las autoridades monetarias del país, que intentan parar como la fuga de capitales. Wall Street se recuperó de las caída iniciales y arrastró al alza las plazas europeas. El Dax alemán cerró con un ascenso del 2,46% y el CAC 40 francés subió un 2,19%. Los mercados quedan pendiente de la reunión de hoy de la Reserva Federal de EEUU.