La economía empieza a ver la luz, al menos, las grandes industrias. Así lo atestigua la demanda eléctrica de los grandes consumidores de este sector, que en marzo fue un 8,4% superior a la del mismo mes del 2013. Este indicador, unido a otros datos, como el Índice General de Producción Industrial (IPI) --que registró también en marzo un incremento interanual del 8,1%, en Aragón un 11,6% más--, "evidencian signos del inicio de la recuperación económica", aseguró ayer José Folgado, presidente del operador del sistema, Red Eléctrica (REE).

En un encuentro con medios previo a la Junta General de Accionistas de hoy, Folgado reconoció que la demanda eléctrica total continúa cayendo y está ya en niveles de 1999. Sin embargo, consideró "muy esperanzador" el repunte entre los grandes consumidores, sobre todo los industriales, una tendencia ascendente que relacionó con las exportaciones y el incremento del consumo interno. "Claramente vamos a mejor", sentenció.

Pese a ello, Folgado no consideró necesario incrementar en los próximos años la potencia instalada del sistema eléctrico español, que hoy se sitúa en 108.000 megavatios, suficientes para cubrir una demanda en horas punta que llega a 35.000.

"No llorar"

Sobre la compañía, el directivo señaló que aunque "el 2013 no ha sido fácil", tanto por la caída de la demanda como por el recorte de su retribución, la compañía logró mejorar su beneficio neto en un 7,5% e invertir 563 millones de euros, principalmente en el mallado de la red.

Con respecto al impacto de los recortes, recordó que "no se trata de llorar", porque "el Gobierno tenía como prioridad absoluta reducir y eliminar el déficit tarifario", al tiempo que destacó que la nueva normativa ofrece "estabilidad regulatoria". Asimismo, el operador del sistema espera mejorar su beneficio neto entre un 4% y un 5% este año e invertir entre 500 y 550 millones de euros.

REE es una empresa semipública que se encarga de construir los grandes ejes para transportar la electricidad entre las centrales donde se genera y las distribuidoras que la llevan hasta los hogares. También es la responsable de operar el sistema para que la generación de energía sea exactamente la que se necesita en cada momento.