La industria de la automoción española, que incluye a los fabricantes de automóviles, motocicletas y componentes, recuperó en mayo su superávit comercial (diferencia entre exportaciones e importaciones), después de dos meses de déficit debido a la crisis del coronavirus, tras registrar un dato positivo de 585,9 millones de euros, un 20,2% más que en el mismo mes de 2019.

Así, según datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, en mayo el sector contabilizó una balanza comercial positiva ya que vendió al exterior productos por un valor de 1.747,1 millones de euros, un 58,6% menos, mientras que importó vehículos y piezas por un coste de 1.161,2 millones, un 68,9% menos.

De esta manera, España exportó automóviles y motos que costaban 1.345,6 millones de euros, un 55,5% menos que en mayo de 2019, mientras que envió al exterior 401,5 millones en componentes, un 66,5% menos. Sin embargo, las importaciones de coches y motos bajaron un 74,4%, hasta 481,4 millones, y las de componentes un 63,3%, con 676,7 millones.

Por todo ello, los fabricantes de automóviles y motos registraron un superávit comercial en mayo de 864,2 millones, un 24,3% menos que el año pasado, mientras que las empresas auxiliares tuvieron un comportamiento un 57,5% mejor que el año pasado, a pesar de quedarse con un déficit de 278,2 millones de euros.

LIGERO ASCENSO

Gracias a este avance en mayo, en los cinco primeros meses del año el balance comercial del sector del automóvil volvió a su senda positiva, con 1.360,1 millones, un 3,8% más que en el mismo periodo de 2019.

Las exportaciones de automóviles y motos bajaron un 31,9% hasta mayo, con 9.147,9 millones, mientras que sus importaciones disminuyeron un 42,1%, con 5.296,9 millones. Por ello, la balanza comercial de esta categoría bajó un 9,9%, con 3.851 millones en positivo.

Por su parte, los fabricantes de componentes vendieron al exterior 3.581,7 millones de euros, un 39,5% menos, e importaron 6.072,7 millones, un 31,6% menos, por lo que cerraron los cinco primeros meses del año con un déficit de 2.490,9 millones, un 15,9% más.