La rebaja de hasta un 60% aplicada en el precio de 2.070 medicamentos, además de generar un ahorro para la Sanidad pública --de unos 500 millones de euros--, amenaza con provocar una criba entre los laboratorios españoles, que pueden ver disminuidos sus ingresos hasta en un 37%. Los fabricantes más afectados son los de genéricos, que confían en ganar mercado para compensar el recorte de facturación, y evitar así despidos.

La reducción de ingresos para los laboratorios oscilará entre un 37,5% y un 1,6%, en el caso de los menos expuestos al recorte por tener más productos fuera de la lista, según el sector. Fuentes de la patronal Farmaindustria han señalado que se trata de un "duro golpe" que obliga a muchas empresas a plantearse su viabilidad. Así, algunas empresas han puesto de manifiesto la gravedad del impacto, alegando que mientras que sus costes no se reducen, sí que lo hacen los precios de venta y, por tanto, el beneficio.

ADAPTACION AL MERCADO Una encuesta de las patronales cuantifica en 2,6% el recorte de plantilla en las empresas más perjudicadas, principalmente productoras pequeñas y medianas, de capital español, de medicamentos genéricos. El director general de la Asociación de Fabricantes de Genéricos (Aeseg), José Zamarriego, advierte de que "las empresas tendrán que adaptar su estructura a las nuevas condiciones".

Pero los laboratorios no son los únicos afectados por la bajada de precios de 2.070 medicamentos, también las empresas de distribución, con un efecto doble. "Nuestra facturación se va a ver reducida porque nuestros ingresos van a ser menores, ya que trabajamos con porcentaje sobre el precio", comentan desde Safa Galénica en Zaragoza, donde estiman que su facturación puede caer en torno a un 6%. Reducción que también prevén en Aragofar, aunque todavía no han calculado a cuanto puede ascender.

Desde las distribuidoras farmacéuticas destacan que a esta caída de ingresos hay que sumar "el trabajo añadido que ha conllevado la renovación del inventario y la consiguiente devolución de medicamentos, con un sobrecoste de personal y logística. Un complejo proceso que se va a alargar durante meses", comentan desde Aragofar.

La tabla de salvación para todas ellas puede ser el aumento de la cuota de mercado de los genéricos, que está estancada en el 4,5% del valor generado por la prescripción de medicinas y en el 6,5% de las unidades vendidas. Zamarriego dice que la apuesta por los medicamentos genéricos es una medida más efectiva de ahorro para la sanidad.

La patronal Farmaindustria mantiene contactos con el Ministerio de Sanidad para intentar que las nuevas rebajas de precios se apliquen de forma gradual, según su director general, Humberto Arnés. El objetivo es que la merma máxima de facturación sea de un 10% anual. Arnés opina que "carece de lógica que el ahorro público recaiga en el sector, porque lo pone en riesgo".

Otro efecto de la decisión gubernamental será la reducción de las inversiones y gastos en investigación y desarrollo, que alcanzan 900 millones de euros anuales. Los laboratorios representan el 20% de la inversión española en I+D.