El estudio del profesor Luis Lanaspa sobre Localización de la actividad económica en Aragón, presentado ayer en Morillo de Tou, indica que el nivel de infraestructuras marca la llegada de población y empresas. En este sentido, aunque la deslocalización obedece a ventajas comparativas (beneficios fiscales, salarios...), la existencia de una buena red de infraestructuras permite una reducción de los costes y, por ende, contribuye en cierto modo a aplacar la fuga de empresas, señala Lanaspa.