A partir del 20 de octubre, cuando esté operativa la integración de Caja3 en el sistema informático de Ibercaja, medio centenar de puestos de trabajo del centro de IBM (antigua ATCA) en Zaragoza penden de un hilo. El hasta ahora socio tecnológico de Caja3 no ha aclarado el futuro de este grupo de empleados para evitar un conflicto laboral en pleno proceso de migración de datos. Ante esta situación, el comité de IBM volvió a reclamar ayer a Ibercaja que "no prescinda de los recursos humanos" de este centro, que cuenta con una elevada reputación en el sector financiero.
