Nueva advertencia de la directora ejecutiva del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, a las autoridades europeas: se ha avanzado mucho en la integración económica en los últimos años, pero sigue siendo insuficiente para poder afrontar con tranqulidad una nueva recaída de la economía.

"Europa es más resistente que hace 10 años, pero no lo suficiente", declaró Lagarde en la apertura de un simposio organizado en el Banco de Francia en París. Uno de los problemas que destacó es que "los beneficios del crecimiento no se reparten lo suficiente".

Hizo notar que la zona euro "es un sistema joven y relativamente incompleto" y que, en un momento en que se está viendo confrontada a una ralentización, es hora de darle "un empujón", en particular para completar la unión bancaria y del mercado de capitales.

"Su sistema bancario es más seguro, pero no lo suficiente", lamentó la directora ejecutiva del FMI, que insistió en que "una unión monetaria necesita una unión bancaria".

Abogó por "un sistema común de garantía de depósitos" que esté financiado por las entidades financieras y no por los contribuyentes. Para ilustrar lo que llamó "el coste de la fragmentación", señaló que hay países de la moneda única donde los costos de financiación, en términos de tipos de interés, son el doble que en otros.

"Hay que dar un nuevo acelerón a las finanzas en la zona euro", destacó la exministra francesa, que pidió "a los dirigentes de la zona euro" que reactiven sus discusiones y acepten "difíciles compromisos" para desbloquear la situación porque eso servirá para "liberar todo el potencial" de la unión bancaria. Entre las reformas que considera necesarias para completar la unión bancaria y del mercado de capitales, citó la "transparencia de la información" en la actividad financiera y un trato de las inversiones de otros países europeos como si fueran inversiones internas.