El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha afirmado hoy que la llegada del grupo catalán Guissona a Épila (Zaragoza) va a cambiar el panorama económico de la Comunidad, y de manera "formidable" la agroalimentación, y ha apostado por trabajar con todo el sector para que el impacto sea el máximo posible.

Así lo ha indicado el presidente en Épila, donde hoy el alcalde, Jesús Bazán, ha firmado ante numerosos vecinos de la localidad la adhesión del ayuntamiento al convenio con el Gobierno de Aragón y Guissona para que el grupo catalán levante un nuevo centro de producción en el que prevé invertir 400 millones de euros y crear 4.000 empleos cuando complete el complejo, en un plazo de diez a doce años.

En declaraciones a los medios, Lambán ha vaticinado un éxito "grandioso" a este proyecto por el impacto que va a tener sobre la economía aragonesa, al tiempo que ha subrayado la necesidad de empezar a trabajar con las cooperativas agrarias y agentes sociales involucrados en el sector para que su impacto sea el máximo posible.

En ese sentido, ha remarcado que hay que preparar la economía aragonesa para recibir esta inversión y aprovecharla al máximo, y el Gobierno de Aragón también trabaja en ese sentido.

Ha asegurado que su Ejecutivo está desarrollado "a velocidad de crucero" todos los trámites administrativos para impulsar el proyecto y estudia cómo financiará las aportaciones económicas necesarias para habilitar los accesos y servicios que necesita el centro.

El presidente ha incidido en que hoy es una jornada "histórica" para Épila y para Aragón porque supone que tres partes -dos administraciones y una empresa- conciertan sus esfuerzos para desarrollar un proyecto que va a cambiar la economía aragonesa y ha asegurado que su Gobierno cumplirá escrupulosamente con sus compromisos.

Lambán ha enfatizado que se trata quizá del grupo agroalimentario más importante de España, con un modelo pionero que implica a toda la cadena alimentaria, desde la crianza de animales hasta la venta de sus productos en sus tiendas BonÁrea, y en que su implantación en Aragón evidencia la hermandad con Cataluña frente a los "insensatos" que han tratado de que las relaciones entre ambas comunidades se produjeran en términos de conflicto.

El alcalde, por su parte, ha insistido en que la firma del convenio supone el "pistoletazo de salida" para que Guissona haga realidad su proyecto en Épila, cuyo ayuntamiento lo declarará de interés municipal para que pueda contar con las máximas bonificaciones fiscales que permite la ley.

Ha concretado que el ayuntamiento ya trabaja en facilitar unas permutas de terrenos con Guissona para que pueda empezar a preparar el suelo y el desarrollo del proyecto, con la previsión de que las obras, con movimiento de tierras, puedan comenzar a principios de 2018.

En su intervención, ha apuntado que el ayuntamiento colaborará con el Gobierno de Aragón y con Guissona para la obtención de suelos, evitando prácticas "especulativas", y que dará máxima prioridad a los procedimientos administrativos, en especial hacia la reducción de plazos una vez declarado de interés autonómico y municipal.

También para garantizar el abastecimiento de agua, que es "vital" para la empresa, y en ese aspecto, ha advertido de que es muy importante para completar el desarrollo de este proyecto que terminen las obras del pantano de Mularroya "de un vez por todas".

A la firma han asistido, entre otros, el consejero delegado y el director de Nuevos Proyectos de Guissona, Ramón Alsina y Salvador Reich, además de representantes de las organizaciones agrarias y sindicales.