La planta de Comoplesa Lebrero, dedicada a la fabricación de maquinaria para la construcción de carreteras y propiedad de Telcon (filial del grupo Tata) desde el 2008, cerrará su puertas en las próximas semanas tras 60 años de actividad en la capital aragonesa. De hecho, la firma ya ha presentado un ERE de extincion para 12 de los 15 trabajadores que quedan en la plantilla, después de que en junio del 2012 ejecutara otros 49 despidos. Unas extinciones de contratos que supusieron entonces el cese de la producción (en las instalaciones del polígono El Pilar ya solo estaban en marcha las oficinas técnicas).

La compañía justifica el cierre en la caída del sector de la construcción en España, una visión que no comparten fuentes del comité, que aseguran que el "declive" en la planta comenzó "en cuanto Telcon la compró en el 2008 a la familia aragonesa Lebrero". "Desde entonces ha ido deslocalizando la producción a su factoría de la India y trasvasando toda la tecnología, un proceso que culminó en el 2012 cuando dejamos de fabricar", explican las citadas fuentes.

Según apuntan, por aquel entonces la filial de Tata se comprometió a reanudar la producción unos años después, una promesa que ha incumplido con el anuncio del cierre. "Creemos que desde el primer momento pensó en deslocalizar la planta, porque ni ha invertido ni ha apostado por el proyecto industrial", denuncian.

Lebrero, que se fundó en 1954, se une así a las firmas aragonesas participadas por el grupo indio Tata (Serviplem y Tata Hispano) que se hunden con la crisis.

Los 49 despedidos en el 2012 recibieron una indemnización de 30 días con un tope de 24 mensualidades.