Los amantes de los productos ecológicos cuentan desde hace unos meses con un nueva oferta de alimentos lácteos con sello aragonés, algo que no existía hasta ahora. Se trata de la empresa Lácteos Torre del Conde, impulsada por dos jóvenes ganaderos zaragozanos, los hermanos Juan y Javier Sanz, que bajo la marca Torreconde comercializan leche fresca de vaca, queso fresco y yogur natural que elaboran en su granja de Muel. Todo un ejemplo de emprendimiento en el medio rural y en el sector agroalimentario que está teniendo muy buena acogida. El sabor es la clave del éxito, pero también la mayor conciencia de los consumidores sobre los beneficios de los productos de proximidad.
Su abuelo había sido ganadero vacuno toda la vida, un legado que han recuperado. «Siempre habíamos querido retomar la tradición familiar y vimos que había una oportunidad en el mercado: en Aragón no había ningún productor de lácteos ecológicos. Todos los que se consumían venían de Albacete, Cataluña o Galicia», explica Javier, de 33 años, que al igual que su hermano Juan, de 30, es ingeniero técnico agrícola. Juntos han impulsado proyectos de negocio en otros sectores y desde hace tres años fueron madurando el de la leche, que tomó cuerpo a principios del 2016 con la puesta en marcha de la explotación ganadera.
Para hacer más llevadera la inversión inicial, que es elevada por el alto coste de las vacas lecheras, han utilizado como financiación el sistema del leasing, que han llevado a cabo a través de la empresa catalana Cipsa Pecuaria. De esta manera, pagan un alquiler mensual por los animales, que al cabo de cinco años pasarán a ser de su propiedad. No es la primera experiencia en España de la fórmula «vacas por leasing», pero sí en Aragón. El proyecto cuenta ya con tres trabajadores (al margen de sus promotores) y ha requerido un desembolso económico de 100.000 euros.
Lanzamiento exitoso
Esta singular vaquería de Muel está situada sobre una finca de producción ecológica de 200 hectáreas de terreno y abrió esta semana sus puertas a un grupo de periodistas para dar a conocer su funcionamiento. La granja acoge actualmente a 16 vacas lecheras de la raza Fleckvieh procedentes de Austria y pronto empezarán a producir seis ejemplares más. Los hermanos Sanz han creado de la nada una moderna instalación ganadera que demuestra que el carácter ecológico y natural de su explotación no está reñido con la apuesta por la tecnología. Prueba de ello es su robot de ordeño, que realiza esta labor de forma totalmente automatizada.
El lanzamiento comercial de los productos llegó a finales de junio y el boca a boca ha funcionado. Estos se venden hoy en alrededor de 40 tiendas especializadas en alimentación ecológica y vegetariana de Zaragoza y su entorno. Pero si por algo se ha hecho conocida Torreconde es por su presencia en el mercado ecológico que cada mañana de sábado (de 8 a 14 horas) se celebra en la plaza del Pilar. La leche se comercializa en botella de cristal de un litro a un precio que ronda los dos euros. «No nos podemos quejar, la acogida ha sido muy buena. La gente que prueba nuestros productos repite. Tenemos mucho consumidor fiel», apunta Javier.
Calidad y sabor
Si por algo triunfan sus productos es, recalca, por el «sabor a leche de antes» y su excelente calidad, con ausencia total de hormonas o antibióticos de acuerdo a los criterios de producción ecológica que marca la regulación. El bienestar animal es también clave. Los animales pueden pasear libremente por buena parte de la finca.
La empresa también sirve a dos colegios de Zaragoza y prepara su salto a otras puntos fuera de Aragón, como Barcelona y Madrid. Paralelamente al crecimiento de su red de distribución, Torreconde quiere ampliar su familia de productos con quesos madurados y postres (cuajadas, natillas, arroz con leche, flan), que se irán lanzando al mercado en los próximos meses. Y al margen del negocio lácteo, los hermanos Sanz ultiman la comercialización de aceite de oliva ecológico bajo la marca Olium, que producen con un olivar situado en la misma finca.
