La decisión de Donald Trump de abandonar el acuerdo nuclear con Irán va a repercutir en los bolsillos de millones de españoles. En las últimas semanas, el temor a que EEUU impusiera nuevas sanciones comerciales a Teherán ha disparado el precio del petróleo, lo que a su vez ha provocado un encarecimiento de los carburantes que a partir de ahora podría intensificarse aún más. Esta semana, el precio medio del litro de la gasolina y del gasóleo ha encadenado su sexta subida consecutiva para escalar a nuevos máximos desde verano del 2015. Estos incrementos han provocado que llenar el depósito en España cueste de media 2,4 euros más que a principios de año.

Ayer, la mayoría de gasolineras de Zaragoza vendían el litro de gasóleo A habitual (el combustible que utiliza el 60% de los vehículos en España) a 1,229 euros. Así, repostar 55 litros cuesta 67,6 euros, frente a los 53,4 que había que pagar en abril del 2016, cuando el litro de gasoil en la capital aragonesa rondaba los 0,971 euros, según los datos recopilados por este diario.

A pesar de la subida de las últimas semanas, los carburantes siguen estando mucho más baratos que en 2012, cuando se alcanzaron máximos históricos. En abril de ese año, llenar el depósito en Zaragoza costaba 76,3 euros.

El alza que vienen registrando los combustibles desde el inicio del año es una continuación del encarecimiento que empezó a producirse en el 2017 debido a los recortes de producción de petróleo acordados por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y Rusia, un ajuste que elevó el precio del barril. No hay que olvidar que el coste del crudo representa en torno al 35% del precio final de los carburantes. Ahora, las sanciones impuestas a Teherán, que supondrán retirar del mercado la producción iraní (una de las mayores del mundo), han disparado aún más el precio del barril. El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ya avisó el miércoles a las grandes petroleras que controlan el sector que su departamento estará «vigilante» para evitar márgenes abusivos ante este repunte de precios.

LAS MÁS BARATAS / Aunque los consumidores son conscientes de que la diferencia de precios entre las gasolineras de las grandes petroleras no son sustanciales, también saben que el que busca, encuentra. Así, el ahorro que se podía lograr ayer en Zaragoza llenando el depósito en una u otra estación alcanzaba los 4,5 euros en el caso del gasóleo.

Todo parece indicar que los carburantes se seguirán encareciendo en los próximos meses y el año que viene aún más, ya que el proyecto de los Presupuestos Generales incluye un importante cambio en la presión fiscal en los combustibles que afectará a todas las regiones. En Aragón, cada litro puede encarecerse 2,4 céntimos.