De un tiempo a esta parte la tecnología LED se ha convertido en hegemónica en el mundo de la iluminación por su mayor durabilidad y menor gasto energético. Bien lo sabe la empresa aragonesa Clover LED Lighting, pionera en España en el diseño, producción y venta de esta tecnología con soluciones lumínicas que exporta a 14 países. Con la innovación y la internacionalización como bandera, esta startup ha ido creciendo y evolucionado tejiendo alianzas con numerosos operadores y coloboradores. Incluso, ha dado el salto a otras líneas de negocio dentro del sector de la energía.

La compañía fue fundada en el 2009 por el zaragozano José Ignacio Ibáñez Soria, que decidió emprender su propio negocio tras su paso por la multinacional Philips en Holanda, en la que dirigió un área de I+D durante cuatro años. Por entonces, la iluminación LED empezaba a despegar y esta firma fue una de las primeras en implantar este producto a nivel nacional en un momento en el que los grandes del sector preferían aferrarse por razones comerciales en sistema de iluminación tradicional.

Poco a poco, Clover LED ha ido engrosando su cartera de clientes, que ha llegado a 3.000 dentro y fuera de España, entre los que destacan grandes compañías como BSH, Pikolín, Repsol o Caladero. También ha desarrollado proyectos de iluminación para los metros de Barcelona y Caracas, así como para el Ayuntamiento de Zaragoza, la DGA o el centro comercial Aragonia.

La empresa tiene su sede principal en Zaragoza, donde se encuentra su oficina técnica y de I+D, que se encarga del diseño de los productos, la ingeniería y el desarrollo de los proyectos. Cuenta además con una delegación en Caracas (Venezuela) y otra en la ciudad de Shenzhen, en China. En este país asiático realiza la fabricación con un control directo de todo el proceso, siguiendo así el modelo de trabajo de las grandes multinacionales del sector.

La facturación de la empresa, que el pasado año se situó en 1,2 millones de euros, crece cada año a un ritmo medio del 20%. Entre el 60% y 70% de estas ventas vienen del exterior, sobre todo de Latinoamérica y el norte de África. Su producto con más éxito es hoy una farola solar que no precisa de conexión a la red al alimentarse con una placa fotovoltaica.

Alianza energética

En el 2012, Ibáñez decidió dar un paso adelante y promover el clúster de eficiencia energética de Aragón (Efenar), con el que ha lanzado dos nuevas divisiones para desarrollar proyectos solares y de biomasa. «Nos dimos cuenta que teníamos un nivel alto de clientes a los que podíamos ofrecer servicios punteros e innovadores en diferentes áreas de la energía», señala. Efenar cuenta actualmente con 63 empresas proveedoras.