Los productores de alfalfa aragoneses ya pueden vender este cultivo al mercado chino gracias al convenio que se acaba de firmar entre los gobiernos chino y español para que 24 empresas acreditadas puedan iniciar esta actividad exportadora. Así lo anunció ayer el Ejecutivo autonómico en un comunicado de prensa, donde apuntó que el potencial de este país asiático, al que solo accedía hasta ahora alfalfa de empresas estadounidenses y canadienses, y su capacidad de consumo "abren nuevas expectativas para este producto, muy arraigado en el campo aragonés" por las características de la tierra y la climatología.

En la comunidad hay más de 100.000 hectáreas de cultivo de alfalfa, con una producción que en la campaña del 2012 superó los cinco millones de toneladas, y la mitad de las industrias deshidratadoras de España desarrollan su actividad en Aragón. Además, la comunidad cuenta con su propio ecotipo de alfalfa, llamado Aragón, muy extendido también a nivel nacional y surgido en el centro de investigación de Movera. Se destina a la alimentación de ganado, pero existen expectativas de uso relacionadas con la alimentación humana o la actividad farmacéutica a través de sus jugos, que contienen numerosos componentes de gran valor.

MÁS PRODUCCIÓN Joaquín Capistrós, de la Asociación Española de Fabricantes de Alfalfa Deshidratada (AEFA), señala que Aragón produce el 55% del total nacional, unas 900.000 toneladas, y podría pasar a transformar 1.200.000 toneladas. "Es de esperar que esta nueva demanda en China suponga entrar en una nueva etapa de más producción y contribuya a tener un cultivo más rentable e invertir el ciclo", señala. El consumo de alfalfa en China crece a un ritmo "vertiginoso" porque, debido al incremento del censo de vacas de leche de alta genética hasta cinco millones de cabezas, se producirá un aumento en la demanda de alfalfa de varios millones de toneladas de forraje, argumenta. En este sentido, Capistrós detalla que las primeras solicitudes se tramitaron en octubre de 2010 y hasta julio de 2012 las industrias solicitantes a nivel nacional no superaron la auditoría china.

Para el director general de Producción Agraria del Departamento de Agricultura del Gobierno de Aragón, Jesús Nogués, el sector agrario se halla inmerso en un mercado global y este programa de exportación a China "constituye un reto estratégico para el sector de forrajes desecados", ya que "al conseguir nuevos mercados que diversifiquen la cartera de clientes se logra una mayor estabilidad a medio plazo en la renta de este sector".