Los trabajadores de cerca de 31.000 empresas que han comunicado al Ministerio de Empleo la existencia de acuerdos sobre jubilaciones anticipadas, sí podrán pasar al retiro a los 61 años en las condiciones anteriores a la ley vigente. Para ello se tendrán que dar dos condiciones: que su salida del mercado de trabajo se deba a un ERE, pactos de empresa, convenios o como resultados de un concurso de acreedores antes del 1 de abril del 2013 y que no vuelvan a estar incluidos en algunos de los regímenes de la Seguridad Social.

Además, se establecía la cautela de que la medida afectaría a las pensiones causadas antes del 1 de enero del 2019. Ese día finalizó el plazo que la última reforma dio a las empresas para comunicar al ministerio que tenía este tipo de compromisos fruto de la negociación colectiva. Se trataba de salvaguardar a los empleados que estuvieran incluidos en ERE, acuerdos de empresa o decisiones concursales, aunque su abandono de la plantilla se realizara en varias fases y con acuerdo.