Los autónomos comienzan a tener una percepción más favorable de la situación económica ya que la mitad de ellos facturó más en el 2016 que durante todo el año anterior. Pese a ello, este colectivo lamenta que fuera un año perdido legislativamente hablando. La mayoría de ellos considera que mantendrá o mejorará su actividad durante el 2017. Respecto al empleo, confían en que consolidarán sus plantillas, si bien un tercio prevé contratar más trabajadores, según el primer barómetro del año realizado por la federación de trabajadores autónomos (ATA).

Respecto a la evolución de la actividad, la mitad de los encuestados (49,5%) opina que su negocio mejoró el año pasado, mientras que el 8,5% reconoce que tuvo un crecimiento por encima del 21%. No obstante, para el 25,4% la mejora fue de entre el 11% y el 20%, y el 50,3% habla de un repunte de la actividad inferior al 10%. En relación al futuro más inmediato, tres de cada cuatro autónomos cree que la situación va a mejor.

En este sentido, se extiende la idea de que el negocio no empeorará en el 2017 (el 82,3% así lo considera). Incluso el 43,2% espera resultados más positivos que el pasado año. Uno de ellos se dará en el empleo, ya que, según Lorenzo Amor, presidente de ATA, los autónomos serán los responsables de la creación de más de 100.000 empleos en el 2017.

MENOS CRÉDITO / El año pasado solo tres de cada 10 autónomos (36,1%) solicitó financiación en una entidad financiera, un porcentaje muy similar al del 2015. De todo ellos, el 66% tuvo suerte y se le concedió la financiación solicitada, pero el 15,7% recibió menos cantidad de la solicitada.

La morosidad tanto pública como privada afecta al 49,3% de los autónomos y, según ATA, estga situación se agravó el año pasado ante la parálisis política y la interinidad del Gobierno. El plazo medio para hacer efectivas las facturas rondó aproximadamente los seis meses. Pese a ello, se ha incrementado hasta el 10% el grupo de autónomos que tarda más de un año en cobrar.

Sobre el pago de impuestos, la mayoría de los encuestados (54,2%) se decanta por bajar el IVA y el 39,2% apuesta por reducir el impuesto sobre la renta.