Tras las primeras reacciones por la detención de Carlos Ghosn el pasado lunes, acusado de fraude financiero por las autoridades de Japón fruto de una investigación interna llevada a cabo por Nissan, la Alianza formada por ésta última, Renault y Mitsubishi ya ha manifestado su intención (por separado) de cesar al dirigente. El principal objetivo de la corporación es ahora sobrevivir tras la salida de Ghosn.

«Ghosn no está en condiciones de liderar Renault», declaró Bruno Le Maire, ministro de finanzas de Francia (país que posee el 15% de las acciones de la marca). «No hemos solicitado aún el cese de Ghosn de manera formal por una simple razón, aún no tenemos pruebas y tenemos que seguir el procedimiento legal», añadió el ministro.

Mitsubishi, por su parte, anunció ayer que propondrá el cese del directivo como presidente de la marca y que iniciará una investigación interna propia. Así, las tres marcas de la Alianza han comunicaron que propondrán el cese inmediato de Ghosn como presidente de las mismas.