El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, aseguró ayer que es "absolutamente prematuro" aventurar que el recibo de la luz sufrirá un incremento adicional como consecuencia de los costes derivados del cumplimiento del plan de reducción de emisiones contaminantes. Montilla matizaba así las declaraciones efectuadas el día anterior por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, quien dio por hecho el aumento de las tarifas eléctricas para sufragar los costes.

El ministro señaló que el actual marco tarifario, que limita al 2% la subida anual, podría ser suficiente para absorber el impacto del plan de asignación de derechos de emisión, que obligará a las empresas eléctricas a rebajar las emisiones de CO2. En su opinión, "la composición de la tarifa (cuya metodología fue aprobada por el anterior Gobierno del PP para el periodo 2003-2010) tiene diversos componentes, y algunos de ellos ofrecen un cierto margen y recorrido" para compensar la subida de costes originada por el Protocolo de Kioto. Entre ellos, mencionó los costes de transición a la competencia (CTC) y las compensaciones por las moratoria nuclear, que al ser variables y tener un "límite temporal" podrían ayudar a mantener el tope de la subida del recibo en el 2%.

ALARMA INFUNDADA Montilla se remitió a la reacción de las compañías para lanzar un "mensaje de tranquilidad". "Hay empresas que han dicho que no será necesario revisar las tarifas, con lo que no seré yo quien diga que los costes supondrán un incremento de las mismas", indicó antes de añadir que "no hay que crear alarma". "Tampoco podemos decir que Kioto nos va a salir gratis, porque sería un acto de irresponsabilidad", puntualizó.

El director de estrategia y desarrollo de Iberdrola, José Luis del Valle, confirmó la opinión de su compañía de que el reparto de derechos de emisión no exigirá una subida del precio de la luz, al existir en el marco tarifario "colchones" que pueden absorber el incremento de los costes de generación. En cambio, el vicepresidente de Unión Fenosa, Honorato López-Isla, auguró que Kioto provocará una subida de tarifas porque el tope del 2% "probablemente" no bastará.

El presidente de Cepsa, Carlos Pérez de Bricio, descartó que el plan de asignación vaya a provocar una subida de los carburantes. Montilla también abogó por penalizar el "derroche" de energía con medidas como el encarecimiento de la tarifa eléctrica a partir de determinado nivel de consumo, con el fin de incentivar el ahorro.