Los planes para convertir en un hub logístico la Terminal Intermodal de Monzón (TIM), propiedad del grupo aragonésa Samca, dan un nuevo paso adelante. Un tren regular de productos agroalimentarios une el Puerto de Tarragona con el municipio oscense con una expedición semanal que carga 700 toneladas por viaje, operada por Renfe Mercancías.

Según informó ayer la Autoridad Portuaria de Tarragona (APT), se trata de la primera experiencia de puesta en servicio de un puerto seco agroalimentario, lo que facilitará la fluidez de la cadena logística desde el enclave marítimo.

En junio del 2017, el nuevo servicio se testó en una prueba piloto y el pasado mes de diciembre salió el primer tren, el 4 de enero, el segundo, y el 11, el tercero, con la previsión de que haya un convoy cada miércoles. Este servicio supone introducir el ferrocarril en unos tráficos en los que la infraestructura tarraconense es líder para llegar a su zona de influencia y, gracias a la colaboración con TIM, se optimiza y mejora la cadena logística.

Clave para los piensos

La zona del valle del Ebro en la provincia de Huesca tiene una producción máxima de 3,4 millones de cabezas de porcino y las granjas productoras -y fabricantes de piensos- están en el entorno de la terminal de Monzón. La materia prima para elaborar esos piensos proviene, sobre todo, del Puerto de Tarragona y de Francia, por lo que las relaciones comerciales entre las instalaciones tarraconenses y de Aragón son muy estrechas. A través de la instalación portuaria se importan cereales, carbón, pasta de papel y productos refinados que son transportados para el uso de las empresas aragonesas.

A este enlace ferroviario podría unirse pronto otra conexión ferroviaria entre Monzón y la ciudad francesa de Lyon, tal y como anunció el pasado mes de junio el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, lo que reforzaría aún más el potencial de la terminal.