Como cualquier mercado de acciones, el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) no es el paraíso financiero. Se gana y se pierde. Y en su corta historia hay suficientes casos que ilustran ambas versiones. La última salida, esta semana, muestra el lado positivo, al menos, en los primeros pasos que NPG Thecnology da en este parquet para empresas de reducida capitalización que buscan expandirse, que tiene una regulación diseñada específicamente y unos costes y procesos adaptados a sus características.
NPG debutó el martes con una de las subidas más espectaculares que se recuerda en el MAB: 64,71%. En una semana en el mercado prácticamente ha doblado su precio: salió a cotizar a 1,36% y cerró el viernes por encima de los 2,70 euros. No es el único éxito del debut. El director gerente del mercado, Jesús González Nieto-Márquez, destacó: "La cantidad obtenida demuestra la eficacia del MAB como herramienta de financiación, al igual que viene sucediendo en numerosas ampliaciones de capital lanzadas por otras empresas".
NPG Technology es una empresa española, creada en 2001, y de Madrid, especializada en la fabricación y comercialización de productos de telecomunicaciones, electrónica e informática, presente en España, Portugal, Francia, China y Colombia. Acude al MAB con el propósito de cimentar su expansión.
NPG es la vigesimosegunda empresa que sale a cotizar en el MAB. Las anteriores han logrado financiación por un total de 104 millones de euros en los cuatro ejercicios de existencia del mercado. Las primeras incorporaciones fueron en el 2009 con Zinkia e Imaginarium. El MAB, nacido en plena crisis financiera, tuvo un lento arranque, pero el 2013 supuso el despegue, con subidas de tres dígitos en varios valores y con una capitalización bursátil total que triplicó la del 2012.
Destaca el crecimiento de Gowex, la compañía con mayor capitalización bursátil. Las acciones de esta empresa de comunicaciones wifi registraron alza cercana al 500% ese año. La progresión de Gowex y otras en el 2013 ha dado pie a considerar el MAB como "un camino para el pelotazo rápido" --comenta un analista--, más que la versión española del Nasdaq estadounidense que ilumina su creación.
"Se trata de un percepción errónea de este mercado por parte de algunos inversores. La mayor volatilidad les induce a buscar rentabilidades rápidas, pero este es un mercado para el medio y largo plazo", afirma, Mariano Sancho, responsable de la relación con los inversores de Ebioss. Esta empresa salió a cotizar en el 2013 y posteriormente realizó una ampliación de capital. En total ha captado 10,8 millones de euros para soportar su expansión.
Pero no todas son historias de éxito en este mercado. Zinkia, la productora de Pocoyó, fue la primera en entrar al MAB y acudió al concurso de acreedores el 16 de abril para poder alcanzar un acuerdo de refinanciación de su deuda.
