Hace un año, el nuevo presidente de Naturgy (hasta entonces Gas Natural), Francisco Reynés, decidió cambiar de estrategia: devaluación de las centrales tradicionales, que le hizo anotarse unas pérdidas contables de 2.822 millones de euros el año pasado, y aumento del 60% en el dividendo en cinco años.

Todo ello significó la apuesta por las energías renovables, que se ha traducido en 138 megavatios (MW) en proyectos solares y eólicos puestos en operación en el primer trimestre en España y otros 777 MW que entarán en operación dentro de este ejercicio. Estas actuaciones suponen una buena parte de los 301 millones de euros en inversiones hasta marzo. La capacidad instalada en el país asciende ya casi a 1.320 MW, un 15% más que hace un año.

La compañía ha presentado sus resultados del primer trimestre, que arrojan un beneficio neto ordinario de 377 millones, lo que supone un incremento del 16%. Las ventas netas, 6.349 millones, se mantuvieron casi estacancadas, con un ligero retroceso del 0,6%.

El resultado de explotación ordinario alcanzó en el periodo los 1.167 millones, un 6% más que en un año atrás. La compañía destaca las actualizaciones tarifarias en Latinoamérica, "que han reconocido la devaluación de las divisas y la inflación que tuvo lugar en el 2018".

PROYECTO INDUSTRIAL

Reynés afirma que el grupo "continúa con su proyecto industrial, invirtiendo en renovables y redes", lo que permite a la compañía adaptarse "al mix energético del futuro" ya la calidad del servicio.

Ewl grupo destaca que progresa en la aplicación de su plan estratégico 2018-2022. A 31 de marzo pasado, la deuda neta de Naturgy se situó en15.003 millones, un 2% menos que a finales del año pasado. La empresa lo atriuye "a un mayor foco en la generación de caja, tras haber destinado 560 millones para el pago del dividendo complementario del 2018 y un total de 135 millones para el programa de recompra de acciones propias durante el trimestre".

Hasta el 31 de marzo, la compañía destinó 238 millones para recomprar acciones como parte de un programa anual que ha de llegar a 400 millones y que acabará a finales de junio próximo.

A su vez subraya que se mantiene la hoja de ruta en cuanto al plan de eficiencias. El área de negocio que más aumentó fue la de infraestructuras en la zona norte de Latinoamérica (México y Panamá), con un resultado de explotación de 101 millones, con un alza del 68%.

La compañía destaca que mantiene sus objetivos en eficiencia. Con este proyecto ha reducido su perfil de riesgo. Dentro de este objetivo ha aflorado ahorros de unos 50 millones.