La nueva economía y los retos que representa para la sociedad irrumpieron con fuerza en la 33 Reunión del Círculo de Economía en Sitges. El prestigioso foro de reflexión económica que reúne a académicos, empresarios y pensadores, quiso confrontar a sectores tradicionales, en plena transformación por el impacto irrefrenable de la digitalización, con los líderes de las plataformas tecnológicas que tensionan a administraciones y a lobies establecidos.
Por primera vez en la historia del Círculo, actores de sectores disruptivos que tienen en común el no formar parte de las organizaciones empresariales, ni de las patronales y que operan en muchos casos en un vacío legal, acudieron a explicar su visión de la evolución del negocio. En estas transformaciones no sobrevive el más fuerte si no el que mejor capacidad de adaptación tiene, afirmaba Charles Darwin.
La industria de componentes del automóvil (Gestamp), la de gran distribución (El Corte Inglés) y la banca (Caixabank) se confrontaron con las redes sociales (Facebook), el alquiler de apartamentos vacacionales (Airbnb) y el servicio de transporte (Cabify). Las primeras del mundo físico y con muchos activos en su balance y las segundas, del mundo digital y prestación de servicios propiedad de terceros. Las primeras, con sus negocios tradicionales en plena transformación, las segundas con crecimientos exponenciales elevados y con riesgos regulatorios por la oposición de Gobiernos y sectores afectados.
Su intervención fue precedida por los vaticinios del premio Nobel de Economía Jean Tirole, que alertó de la destrucción masiva de miles de empleos por la digitalización de la economía o las del consejero delegado de Unilever, Paul Polman, que advirtió el jueves de la imposibilidad de la sociedad de adaptarse a los cambios que tensionará las sociedades y generará grandes choques.
En palabras del premio Nobel, la digitalización creará riqueza, pero la gran pregunta es cómo se distribuirá. «La revolución digital es móvil, los creadores son ciudadanos del mundo y se mueven a los países del mundo con mejores condiciones».
Los presidentes de Caixabank, Jordi Gual; de El Corte Inglés, Dimas Gimeno; y de Gestamp, Francisco Riberas, reconocieron que la estrategia digital debe integrarse en el negocio y no situarse como algo externo. En este sentido, Gual recordó como en el año 2000, en plena burbuja de internet, el banco decidió integrar la digitalización en vez de crear una filial bancaria para operar en internet.
LOS RETOS / Gimeno, por su parte, explicó que el grupo de distribución lider en europa lleva años compitiendo con Amazon y la fórmula ha consistido en mantener los valores tradicionales pero con una tienda «abierta las 24 horas del día los 365 días del año». Los retos de la digitalización también incorporan dilemas éticos y legales. Francisco Riberas señaló que la tecnología permitirá muy a corto plazo la conducción autónoma, pero que eso implicará que se introduzcan algoritmos en los sistemas para determinar en un caso de accidente quién debe ser atropellado antes que otra persona. «Son dilemas éticos que vamos a tener confrontar», señaló el directivo, quien resaltó el enorme impacto que tendrá la robótica, la inteligencia artificial y la tecnología en la automoción.
Los directivos de la red social Facebook, Chris Kim; de la plataforma de apartamentos vacacionales Aibnb, Jeroen Merchiers; y de la firma de servicios de transporte Cabify, Juan de Antonio, coincidieron en la visión de que la revolución digital avanza rápido, es imparable y obligará a los Estados a revisar las legislaciones. Una visión compartida por los presidentes de Caixabank, El Corte Inglés y Gestamp.
Kim, que formó parte del consejo de Facebook hasta el año pasado, aseguró que los 2.000 millones de usuarios de la red son los que hacen a esta compañía tan poderosa. De Antonio, fundador y consejerdo delegado de Cabify, alertó de los peligros de recurrir a un «marco regulatorio muy restrictivo». «Nos arriesgamos a no estar al frente de esta revolución si no permitimos que las empresas locales generen conocimiento y empleo de calidad», dijo.
