El reglamento de la ley del pasado diciembre que prohibe los cortes de la luz a personas en situación de pobreza energética y ligará el bono social (descuento del 25% en la factura eléctrica, que en los casos más extremos va a pasar a ser del 100%) a la renta de sus beneficiarios tardará todavía algunos meses en estar aprobado. Así lo admitieron ayer fuentes del Ministerio de Energía, que no pudieron precisar si dicho reglamento estará aprobado antes o después del verano. «Lo antes posible», aseguraron.

El departamento que dirige Álvaro Nadal explicó que ya ha recibido las propuestas que pidió a PSOE, Podemos y Ciudadanos para elaborar el reglamento y aseguró que están «bastante en línea» con las del ministerio. Energía ha decidido que los hogares con menos de 3 kw de potencia contratada dejarán de beneficiarse de forma generalizada del bono social, pero no así los otros colectivos actualmente incluídos (hogares con todos los miembros en paro, familias numerosas y pensionistas con la prestación mínima).

El 80% de los actuales perceptores del bono social (2,4 millones de contratos y siete millones de beneficiarios) lo son porque tienen una potencia contratada inferior a 3 kw. «Si lo eliminas, tienes que calcular cuántos entrarán por criterios de riesgo (de pobreza energética)», indicaron.