Diseñadas para facilitar la comprensión del suministro y de otros elementos del consumo doméstico, las nuevas facturas de la luz están listas para ser emitidas desde ayer por las comercializadoras. El nuevo modelo aprobado por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, fue publicado ayer por el Boletín Oficial del Estado (BOE), en una resolución de 29 páginas que detalla qué elementos deben formar parte del recibido y un desglose de cada una de las partidas a las que se destina el importe que abonará el ciudadano.

El próximo recibo de la luz tendrá tres grandes bloques: el coste de producción de electricidad, los impuestos y los costes regulados.

Dentro de los costes regulados, Industria ha fijado los porcentajes que aparecerán en el recibo. Los incentivos a las renovables, cogeneración y residuos recibirán el 36,28% de estos costes, el transporte y la distribución, el 32,12% y otros costes regulados, el 31,6%. La factura tipo varía según el tipo de cliente, pero en términos generales constará de tres páginas. La primera incluirá el logotipo de la comercializadora, el importe de la factura, los datos del cliente y un primer desglose por potencia contratada y potencia consumida.

Aparecerán además un gráfico sobre la evolución del consumo, los datos del contrato y un cuadro con los momentos en los que se ha realizado la lectura o qué parte se factura de forma estimada o con lectura real. La segunda página incluirá un desglose del recibo para que el consumidor sepa qué parte del recibo se dedica a cada concepto. La tercera informará sobre el impacto ambiental y las alternativas al precio regulado o del bono social.