La negociación de los salarios de los trabajadores aragoneses del sector de la hostelería sigue creando discrepancias. Si el lunes fueron los sindicatos los que amenazaron con convocar una huelga, ayer fue la patronal la que denunció el bloqueo, por parte de las organizaciones de los trabajadores, del proceso de negociación del convenio colectivo y, por tanto, del incremento salarial «que deberían percibir los más de 17.892 personas que prestan servicio» en la provincia de Zaragoza. La patronal recuerda que ofertó, en la última reunión en el SAMA del pasado 24 de enero, «incrementos salariales del 2% a repartir entre los dos años de vigencia que tendría el convenio, importes que se corresponden con los incrementos medios salariales pactados para los mismos años en el resto de convenios provinciales del sector hostelero». Así, aseguran que se corregirían desigualdades del sector, como el de «las pastelerías con degustación, cuyos trabajadores realizan las mismas funciones que el personal de servicio de una cafetería pero con una inversión salarial sustancialmente inferior». Sin embargo, la patronal afirma que «no pudo contar con el apoyo» de la parte sindical.

De haberse acordado el incremento salarial, la organización señala que la provincia se hubiera posicionado «como la quinta en la que más se ha subido la retribución de los trabajadores».