Patronal y sindicatos ultiman un acuerdo salarial para los próximos años. Ambas partes han acercado posturas con una propuesta de subida desde la CEOE más en línea con la petición de UGT y CCOO, algo que coincide con el cambio de Gobierno y la llegada al Ministerio de Trabajo de Magdalena Valerio. El secretario general de UGT, Josep María Álvarez, admitió ayer que «las negociaciones están muy avanzadas» para cerrar un acuerdo sobre la subida del salario mínimo en convenio a los 1.000 euros de manera progresiva.

Fuentes conocedoras de las negociaciones explicaron que, en los contactos mantenidos esta semana entre CEOE, Cepyme, UGT y CCOO, la patronal habría modificado su planteamiento de subida salarial de «hasta un 2%, más un componente adicional», por un incremento «de en torno al 2 %, más un componente adicional». Este cambio introduce un matiz muy importante para los sindicatos, que no dejaban de repetir que con una subida de «hasta el 2%» incluía también tan solo un 0,1%.

Los sindicatos partieron en las negociaciones reclamando un incremento de los sueldos del 3,1%, resultado de sumar la previsión de la inflación para este año, del 1,6%, más un 1,5 puntos adicionales en concepto de recuperación del poder adquisitivo perdido. Asimismo, los sindicatos reclaman fijar un salario mínimo por convenio de 1.000 euros mensuales en 14 pagas (14.000 euros anuales) a lo largo de la vigencia del acuerdo trianual.

La patronal, por su parte, recuerda que el acuerdo con el Gobierno sobre el salario mínimo interprofesional (SMI) ya elevará la retribución mínima a 850 euros en 14 pagas en 2020 (11.900 euros anuales), si bien se muestra dispuesta a anticipar esa alza para los sueldos más bajos. En lo que no parece que se vayan a poner de acuerdo patronal y sindicatos es en la cláusula de garantía salarial, ya que, mientras UGT y CCOO pidieron que se tuviera en cuenta la desviación de la inflación, la patronal no está dispuesta a incluirla o, al menos, no vinculada al IPC.

El repentino cambio de Gobierno ha pillado a los sindicatos en plena campaña de presión con movilizaciones en la calle y, aunque parece que el Ejecutivo socialista tiene intención de cambiar la legislación laboral, UGT y CCOO no van a modificar de momento su agenda. Ambos sindicatos han convocado una manifestación el 16 de junio para presionar a la patronal para que cierre el acuerdo salarial, pero también para informar al Gobierno de Pedro Sánchez de las mejoras en materia salarial, de protección social, garantía de pensiones y medidas de igualdad.

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, recordó que la legislación laboral no es sólo la reforma laboral del 2012, sino que hay muchas leyes, como el Estatuto de los Trabajadores, que vienen de «muy lejos». «Habrá que empezar a decidir si hablamos de contratos, despido, flexibilidad, prevención de riesgos laborales» y también de otras.