Pikolín prevé concluir las obras de su nueva fábrica de Plaza en septiembre y un mes después iniciará el traslado de sus líneas de producción, un proceso que durará al menos tres meses. El objetivo es que la factoría, en la que el grupo va a invertir en torno a 50 millones de euros, esté totalmente operativa en enero del 2017. Cuando finalice la mudanza, la compañía habrá levantado en la plataforma logística el mayor complejo del sector del descanso de toda Europa, ya que la nueva fábrica se está construyendo junto al almacén que ya ocupa desde el 2011. En total, las instalaciones tendrán una superficie útil de casi 120.000 metros cuadrados.
Aunque la obras de la fábrica ya empezaron el pasado verano --este año trabajarán más de 250 personas en su construcción--, la compañía celebrará el próximo jueves la colocación de la primera piedra, un acto al que asistirán el presidente Javier Lambán y el alcalde Pedro Santisteve. Así lo trasladó ayer el grupo en una nota en la que también informó de los resultados del 2015, un año en el que facturó 392 millones, el 11% más que en 2014 (352 millones).
CRECIMIENTO EN FRANCIA
"Este significativo impulso a las ventas viene dado especialmente por el buen comportamiento en el mercado francés, donde mantenemos el liderazgo con una cuota de mercado del 30%", señaló la empresa. La consolidación de la firma en el sudeste asiático --cuenta con una fábrica en China y otra en Vietnam-- también ha impulsado su cifra de negocio, así como la "recuperación" del mercado español, que representa el 32% del volumen total de ventas. "El sector del descanso en España creció el año pasado en torno al 5,5% y nosotros subimos un 8%", destacaron ayer fuentes de la empresa, que recordaron que la firma aún está "muy lejos de las cifras de ventas alcanzadas en los años anteriores a la crisis".
La compañía prevé seguir creciendo en este 2016 y ya se ha marcado el objetivo de superar al menos los 400 millones de euros de facturación.
El incremento de la producción permitió que en el 2015 no fuera necesario aplicar ningún día del ERE temporal y que en los últimos meses se haya realizado incluso alguna contratación después de varios años con la plantilla congelada y de los 45 despidos ejecutados en el 2013. "La fábrica ha incorporado recientemente a una decena de trabajadores", indicaron fuentes sindicales. Actualmente, el grupo emplea en España a 790 personas, 626 de ellas en Zaragoza.
La apuesta por la diversificación le ha permitido estar en los tres segmentos del descanso: doméstico, hostelero y sanitario, convirtiéndose en líder del mercado en España y en Francia.
