Los trabajadores de las fábricas de BSH en Montañana y La Cartuja ratificaron ayer el preacuerdo alcanzado el pasado 21 de diciembre sobre el nuevo convenio colectivo de la compañía, un pacto laboral que afecta a 1.900 empleados y que estará vigente hasta finales del 2020. Aunque por un ajustado margen (el 52,43% de los votos a favor), la plantilla dio el visto bueno al preacuerdo firmado por la dirección y la mayoría del comité (CCOO, UGT, OSTA y UIT).

El convenio establece para cada año de vigencia una subida salarial del 1,5%, más un 0,25% en complemento personal condicionado al resultado de facturación. Otro aspecto clave son las medidas pactadas para corregir el «abuso» de los contratos temporales. Así, se ha pactado la realización de 184 contratos indefinidos. Además, se garantiza el acceso a la jubilación parcial de 55 empleados.