Los trabajadores de Iberalbion, el centro de atención telefónica que el grupo Barclays tiene en Plaza, rectificaron ayer el preacuerdo alcanzado un día antes entre el comité y la compañía. Así lo determinó el resultado de la votación celebrada, en la que se impuso el voto contrario al pacto, con 246 votos frente a los 178 que lo refrendaban. De esta manera, finalmente sí se celebrará la huelga de 24 horas convocada para este viernes en defensa de la continuidad del empleo, en peligro por la reciente venta del negocio minorista de Barclays a Caixabank.

Tras el encuentro entre ambas partes que tuvo lugar el lunes en el SAMA (Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje), el comité decidió suspender las movilizaciones, que incluían una huelga que se iba a celebrar ayer. Lo hizo porque la dirección de Iberalbión manifestó por escrito su "intención" de mantener al volumen de plantilla actual hasta el 30 de junio del 2015, en lugar de aplicar recortes en diciembre como se preveía en un principio.

Sin embargo, en el referéndum que desarrolló ayer, que contó con una participación de 434 empleados sobre un total de 534, no fue refrendado ese principio de entendimiento. "Una amplia mayoría de los trabajadores considera insuficientes las garantías del empleo a corto plazo, además de no aportar ningún tipo de solución posterior a la integración con Caixabank", señaló ayer el comité de empresa en un comunicado.

Este viernes se celebrará también una asamblea de trabajadores para decidir la estrategia de movilización a seguir. "La plantilla nos reclama una mayor contundencia en las acciones", apuntó el comité, que exigió por ello a Barclays y Caixabank que "asuman su parte de responsabilidad y aporten vías de solución al conflicto".