Podemos Aragón cree que el carbón tiene los días contados y no ve margen para una moratoria de este final. Ante esta «dura» situación, la formación morada consideró ayer que es el momento «de ponerse las pilas» y no perder más tiempo para afrontar una transición «urgente», «real» y «justa» de la comarca de Andorra-Sierra de Arcos y su entorno, el último reducto minero que queda en Aragón. Para lograrlo y asegurar la supervivencia de los municipios dependientes de este sector, plantea la reconversión de esta zona de Teruel hacia una economía verde siguiendo el modelo de éxito de la población francesa de Loos-en-Gohelle.

Así lo explicaron ayer en rueda de prensa el secretario general de Podemos Aragón, Nacho Escartín, el diputado de Unidos Podemos por Huesca en el Congreso, Jorge Luis, y el eurodiputado de Equo, Florent Marcellesi. Todos ellos abogaron por contar en este proceso con la opinión y participación de los vecinos de las zonas afectadas para evitar que se repitan los errores del pasado en la gestión de fondos mineros.

A este respecto, Escartín estimó que Aragón ha recibido unos 350 millones de euros desde 1998 para la reconversión de las comarcas mineras, pero la ejecución de estos cuantiosos fondos ha sido un «auténtico desastre». Esto, apuntó, se ha debido en algunos casos a proyectos empresariales «mal planificados» -como el de la cementera de Andorra que no llegó a ponerse en marcha- o «tramposos», mientras que otras muchas iniciativas no han servido para generar empleo. El balneario de Ariño es, precisó, una de las «pocas experiencias positivas». Por todo ello, recordó a la DGA la necesidad de hacer una auditoría sobre la gestión de estas partidas.

El líder de Podemos fue además muy crítico con el Gobierno de Javier Lambán, al que acusó de «marear la perdiz» en este asunto y de no haber ejecutado dos partidas para la reindustrialización de las zonas mineras incluidas en los presupuestos autonómicos (5 millones en el 2017 y 750.000 euros en el 2018). «No puede ser que de los 44 proyectos financiados por los Miner, ninguno se desarrolle en la comarca de Andorra», aseveró.

dinero e ideas / Frente a esto, Podemos apuesta por situar a esta zona a la vanguardia de las energías renovables, la eficiencia energética, el uso sostenible del agua y la agroecología. Escartín se mostró convencido de que esta transformación «es posible» y «aún hay tiempo» para llevarla a cabo. El problemas, en su opinión, no es de falta de ideas o dinero, sino «que no hay liderazgo institucional para que se haga».

Marsellesi, por su parte, incidió en que el «futuro se va escribir sin carbón» y rechazó los frentes regionales o políticos que piden una prórroga para esta contaminante industria. Defendió asimismo una transición «sin dejar a nadie detrás» e instó a Endesa a revertir en Andorra los ingentes beneficios en la térmica. «Necesitamos como sociedad devolver a las cuencas mineras todo lo que han dado durante décadas y décadas», explicó.