Miguel Angel Lafuente, del PP, mostró su temor ante la posibilidad de que esta reducción del calendario de aperturas en festivos y de horarios semanales pueda provocar pérdida de empleo en las grandes superficies, y se preguntó cómo este recorte va a poder amoldarse a las necesidades de los consumidores. "Se está limitando al comerciante que había ampliado su horario, ya que le quita competitividad" dijo

El diputado de CHA, Chesús Yuste, manifestó que ésta "no es una ley perfecta, pero al menos elimina la espada de Damocles de la liberalización de horarios que amenazaba al pequeño comercio". Pidió más competencias y aceptó resignado los ocho festivos, aunque hubiera preferido menos.

El diputado de PSOE, José María Ibáñez, aseguró que esta ley devuelve competencias a las comunidades con respecto a la anterior normativa, en lo que coincidió con el representante del PAR Antonio Ruspira, quien añadió que el PP tiene un "concepto equivocado" sobre esta materia. Ruspira dijo que la nueva ley protegerá mejor al pequeño comercio que el real decreto del 2000, que favorecía a las "grandes superficies", y permitirá regresar al "consenso" de los ocho días mínimo de apertura en festivos al año y no de doce.