La oposición pidió al Gobierno de Aragón que esté vigilante respecto a la calidad del empleo que el grupo italiano Pini va a crear con el matadero que está construyendo en Binéfar. Así lo reclamaron ayer los diferentes grupos parlamentarios a la consejera de Economía, Marta Gastón, en su comparecencia en las Cortes de Aragón, donde ella aseguró que «no hay nada que ocultar en toda la tramitación».

Esta preocupación está motivada por las últimas noticias sobre la utilización fraudulenta y generalizada de la figura del falso autónomo por parte de las empresas cárnicas. En este sentido, la portavoz del grupo Mixto, Patricia Luquin, mostró su inquietud sobre el compromiso de la empresa para que los contratos «se creen en planta» y no sean falsos autónomos. Por su parte, el popular Ricardo Oliván cuestionó a la consejera por el tipo de empleo que se va a crear a raíz de este proyecto que supone «una gran inversión con grandes expectativas».

La consejera destacó que «el matadero del grupo Pini es un proyecto de peso para la comunidad autónoma y su ubicación siempre ha estado ligada a la localidad de Binéfar». Además, aseguró que los trámites discurren «a tiempo» y que la comarca está realizando un estudio de vivienda para poder acoger a los trabajadores de la nueva planta. También afirmó que el Ejecutivo aragonés y el Ayuntamiento de Binéfar están desarrollando reuniones transversales para estudiar los efectos del proyecto.

POLÉMICA EN LA CONSTRUCCIÓN

La construcción del matadero ha estado salpicada por la polémica, ya que el grupo italiano comenzó la construcción de la planta antes de obtener la licencia de obra. El ayuntamiento le abrió un expediente y ordenó parar los trabajos, aunque Pini puede continuar con el movimiento de tierras para el que sí tiene concedidos los permisos.

El grupo italiano Pini ha invertido 70 millones de euros en la construcción en Binéfar de un matadero porcino que creará 1.600 empleos con previsión de ampliar la plantilla a 2.000 cuando la instalación esté a pleno rendimiento.