La recuperación del Jamón de Teruel toma impulso. Esta Denominación de Origen Protegida (DOP), que aglutina a 232 operadores y sostiene más 2.000 empleos directos en la provincia, incrementó el pasado año un 42% el número de jamones en fresco que entraron a sus secaderos, hasta un total de 355.845 piezas, muy por encima de los 251.461 perniles del 2015.

El repunte de la producción se produce tras varios años de sucesivas caídas y sitúa a la denominación en un nivel algo superior al registrado en el 2011, aunque lejos aún del récord de 800.000 perniles logrado en el 2008. El presidente del Consejo Regulador del Jamón de Teruel, Ricardo Mosteo, se mostró ayer «muy satisfecho» con estos resultados, que anticipan un futuro «positivo». No en vano, los jamones en fresco del 2016 son los que saldrán al mercado a partir de mediados del 2017 -tras un periodo mínimo de curación de 14 meses- y a lo largo del 2018 o, incluso, del 2019.

Por este motivo, restó valor a la caída del pasado año en perniles curados, de los que se marcaron 202.355 piezas (-7,36%). Estas entraron al secadero en el 2013 y el 2014, en plena crisis, lo que explica el descenso. De hecho, la demanda fue «muy superior» a la oferta. «Si hubiera habido más jamones, se habrían vendido», apuntó Mosteo a este diario.

Apuesta por la DOP / El presidente del consejo atribuyó esta reactivación a la mejora general de la economía y del consumo y a la «recuperación de la confianza por parte de nuestros operadores». «Se percibe -agregó- una apuesta clara de los secaderos por el producto de denominación».

En cuanto a la Paleta de Teruel los datos de producción en fresco del 2016 son muy similares a los 2015, con un total de 107.030 piezas, solo un 1% menos que el año anterior (108.638). Esa leve bajada es «algo muy lógico», según Mosteo, dado que en el 2015 se marcó una cantidad importante de producto tras ser declarado como Denominación de Origen Protegida. En curado, la producción se elevó un 57,46%, hasta 81.187 piezas (108.638 en el 2015).

Sobre el proyecto del grupo cárnico Guisonna en Épila, Mosteo afirmó que alegra por «todas la inversiones que lleguen a Aragón», pero consideró que no afectará «ni en positivo ni en negativo» a esta denominación.