El grupo automovilístico PSA registró una facturación de 18.182 millones en el primer trimestre del 2018, lo que supone un incremento del 42% respecto a los 12.798 millones ingresados en el mismo período del año anterior, según datos publicados ayer por la compañía.

Este fuerte aumento de la cifra de negocio se explica por la incorporación al balance de Opel, adquirida por PSA a mediados del año pasado, que contribuyó con unos ingresos trimestrales de 4.838 millones. El consorcio señaló que, tras la puesta en marcha del plan estratégico Push to Pass y a tipos de cambio y perímetro constante, el crecimiento hubiera sido del 21,6%.

Por divisiones, Peugeot Citroën DS contabilizó un volumen de negocio de 10.214 millones en el primer cuarto del año, un 13,2% más, mientras que Faurecia mejoró un 2,6% sus ventas trimestrales, hasta 4.315 millones.

En el capítulo de otras actividades, que incluyen las operaciones restantes de Banque PSA Finance, la compañía se anotó unas cifras negativas de 1.185 millones, frente a los 424 millones de impacto del mismo período del 2017.

MATRICULACIONES

En el capítulo de matriculaciones, el consorcio que preside Carlos Tavares comercializó un total de 1,05 millones de vehículos en todo el mundo en los tres primeros meses del año, un 44,2% más. Opel contribuyó a los resultados comerciales del grupo con 274.679 unidades en lo que va de ejercicio. Peugeot matriculó 509.491 unidades, un 7% más.

Las entregas de Citroën se situaron en 254.768 unidades, un 6,4% más, y DS registró unas matriculaciones mundiales de 13.009 unidades en dicho período, un 6,7% menos.