La Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios (CMVM) lusa ha registrado la oferta pública de adquisición (opa) que presentó Caixabank por el Banco Portugués de Inversiones (BPI), que se inicia este martes. En un comunicado, el regulador informó de que el plazo para que el resto de accionistas acepten o no la operación se ha iniciado a las 08.30 hora local (08.30 GMT) y se prolongará hasta el próximo 7 de febrero.

La CMVM publicó junto a su anuncio las condiciones de la oferta, en la que el Caixabank ofrece un precio de 1,134 euros por acción y el desembolso total que podría llegar a hacer en caso de que todos los accionistas la acepten rondaría los 900 millones de euros.

CaixaBank prevé reducir 900 empleos en Banco Portugués de Inversiones (BPI) en los próximos tres años y cerrar 52 oficinas del banco luso este 2017 con el objetivo de mejorar la eficiencia de la entidad, que cuenta con 545 sucursales en Portugal. Con estas medidas, el banco presidido por Jordi Gual quiere que BPI se convierta en "una entidad más competitiva" e incremente su eficiencia, ya que actualmente la ratio de gastos sobre ingresos se sitúa en el 74% y el objetivo es que pase a un 50% o inferior en el 2019. Así, los planes de CaixaBank son continuar con el programa de ajuste de BPI y generar un ahorro de costes de 84 millones de euros, de los que 45 corresponden a gastos de personal y 39 a reducción de costes generales. Con el ajuste de 900 empleados en tres años, el banco luso situaría su ratio de gastos de personal sobre ingresos en el 35%, frente al 44% actual, siguiendo la media del sector, y este ajuste de personal se realizaría mediante prejubilaciones y desvinculaciones incentivadas.

El Caixabank tiene en sus manos actualmente el 45% de las acciones del BPI y lanzó una opa sobre la totalidad del capital de la entidad, el quinto mayor banco de Portugal. Para avanzar con la propuesta, la entidad catalana puso como condición que los accionistas del banco aceptaran eliminar los límites a los derechos de voto, que restringían el poder de decisión del Caixabank a pesar de ser el máximo accionista. La asamblea del banco aprobó en septiembre suprimir esos límites, por lo que el Caixabank decidió avanzar con la operación.

Después de los españoles, el mayor accionista es la empresaria angoleña Isabel Dos Santos, con el 18,6% del capital, seguido por Allianz, con cerca del 8%. Con unos activos valorados en cerca de 40.600 millones de euros al cierre del 2015, el BPI es solo superado por la estatal Caixa Geral de Depósitos, el Banco Comercial Portugués, el Novo Banco y el Totta, división lusa del Banco Santander que mejoró en este ránking tras la compra del Banif.