El palé de plástico está de moda. Su uso se ha multiplicado en los últimos años, sobre todo por las mayores exigencias higiénico-sanitarias en el transporte y la exportación de productos del sector agroalimentario. Bien lo saben en la empresa aragonesa Ribawood, que se ha convertido en el primer fabricante de este embalaje en España y el sur de Europa. Esta compañía familiar, fundada en 1975, ha vivido un auge de su negocio que le ha permitido ampliar progresivamente la plantilla hasta los 90 trabajadores (un 50% más que hace tres años), y ejecutar un paquete millonario de inversiones en su planta de Villanueva de Gállego. El pasado año, incrementó las ventas un 34,16%, hasta situarse en los 22,4 millones de euros (16,5 millones en el 2015).

«Estamos recogiendo los frutos que sembramos hace unos años», asegura Ana Rivera, responsable de márketing, que alude así al cambio de la línea de negocio que dio Ribawood y que tan buenos resultados le ha dado. La empresa estaba antes especializada en componentes de plástico para los fabricantes del automóvil (en concreto, piezas internas de puertas y maleteros con el sistema de termoconformado), pero en el 2006 decidió a retirarse de este mercado para centrarse en la fabricación de embalajes plásticos (palés, cajas y contenedores plásticos) a partir de material virgen y reciclado, una actividad a la que se dedica en exclusiva desde el 2015.

Más capacidad / «Hoy somos los más grandes del sur de Europa con una reconocida experiencia en el sector», apunta Ana Rivera. La firma cuenta actualmente con ocho grandes líneas de inyección de plástico con una capacidad productiva de dos millones de palés al año, medio millón más que hace un año gracias a las inversiones realizadas. Su plantilla ronda los 90 trabajadores, aunque la cifra varía en función de las puntas de producción.

A pesar de que el mercado español es el gran protagonista de su negocio, la empresa ha reforzado su apuesta para elevar las exportaciones, que hoy suponen el 5% de la facturación. Los principales mercados a los que llega ahora son Francia y el norte de África, mientras que en los próximos años quiere crecer con fuerza en Italia y entrar en nuevos países como Reino Unido.

Clientes de referencia / En cuanto a las inversiones, la empresa de la familia Rivera desembolsó 1,3 millones el pasado año para la compra de nueva maquinaria y la ampliación de sus instalaciones en Villanueva, donde construyó un almacén y una zona de logística exterior de 3.000 metros cuadrados. En el 2017, la inversión superará el millón de euros y se centrará también en la mejora de sus equipos técnicos.

Ribawood cuenta con una amplía gama de palés que suma cada año nuevas referencias, con soluciones especialmente diseñadas para diferentes usos (exportación, logística, carga pesada o sector cárnico), además de ofrecer la mayor personalización posible en cuanto a material, color, o serigrafías.

Entres sus clientes figuran importantes empresas como Heineken, Coca-Cola, Freixenet, Codorníu y grandes cadenas de supermercados. «La clave de nuestro éxito es que siempre hemos estado rodeados de multinacionales y grandes clientes, que han valorado nuestra proactividad», remarca Rivera.