La economía aragonesa crecerá el 3,4% este año y el 2,9% en el 2019, pero este robusto crecimiento no permitirá reducir la tasa de paro por debajo del 10% a finales del próximo ejercicio. Este es el diagnóstico del catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Zaragoza, Marcos Sanso, que ayer presentó las perspectivas empresariales y de coyuntura de la Fundación Basilio Paraíso, perteneciente a la Cámara de Comercio de Zaragoza.
El informe señala que la tasa de paro apenas se reducirá el 1,5% entre 2018 y 2019, aunque la economía Aragón crecerá cuatro décimas más que el conjunto de España en este año y dos más el próximo. «Hemos detectado una ralentización en la creación de empleo» porque el segundo semestre del 2017 fue «excepcionalmente bueno», justificó Sanso. Otro factor que puede influir en este pequeño bache es el incremento de los salarios, mayor en Aragón que en el resto de España durante el 2017 (el 0,5% frente al 0,1% nacional). No obstante, el catedrático consideró que hay nuevos proyectos de sectores como el eólico, agroalimentario y del automóvil, que seguirán tirando del empleo.
EL TIRÓN DE LOS SERVICIOS/ El dinamismo de la actividad en Aragón se justifica por el «sorprendente» comportamiento del sector servicios, principalmente del comercio minorista, y de la demanda. La industria también se ha recuperado tras el «bache» sufrido entre 2015 y 2016 en el que se perdieron unos 14.000 empleos, dijo Sanso. Destaca el dinamismo mostrado por la construcción, la agricultura, las actividades inmobiliarias, el transporte y las manufacturas, entre otras. Esta situación contrasta con el paulatino enfriamiento de las exportaciones, que han ido perdiendo fuelle en los últimos meses.
En este sentido, el presidente de la Cámara de Comercio alertó de los efectos de la guerra comercial abierta por Donald Trump, ya que las grandes empresas tienen «estrategias de multilocalización», lo que podría generar problemas en algunos sectores concretos de la economía.
