Lobón, los que van a morir te saludan. Un grupo de jóvenes agricultores de Teruel, vestidos como el héroe escocés William Wallace en Braveheart, portaban ayer una pancarta con este lema, reflejo, con humor, del sentimiento de "desamparo e injusticia" que les invade desde hace 22 años. Entonces se establecieron unos criterios en la Política Agrícola Común (PAC) que mantienen un "agravio histórico" en el reparto de las ayudas europeas en la provincia y cuyos profesionales del campo exigen, ahora con más fuerza que nunca, que sean modificados. Con ese objetivo, un millar de personas se concentraron ayer en la plaza San Pedro Nolasco de Zaragoza, sede de la consejería de Agricultura, una protesta convocada por los sindicatos agrarios Asaja, UAGA y UPA de Teruel y respaldada por las patronales turolenses, cooperativas, ayuntamientos y partidos políticos, incluido el Partido Popular.

"Exigimos al consejero de Agricultura y a la presidenta de Aragón que peleen para rectificar los mapas y que Teruel esté en el mismo estrato que las otras dos provincias. Si no lo hacen, es porque no les da la gana", era el pensamiento unánime entre los asistentes, quienes, al margen de unas siglas u otras, mostraron unidad en la defensa de sus derechos vistiendo gorras rojas de la futura plataforma Agricultores de Teruel. Eso sí, a pesar de que los líderes sindicales huyeron de enfrentamientos, en el ambiente se respiraba cierto malestar con las otras dos provincias aragonesas, ausentes en la protesta. "Los de Teruel estuvimos apoyando en contra del trasvase del Ebro a pesar de que no nos afectaba", resaltó un agricultor de Alcañiz.

FALTA DE VOLUNTAD POLÍTICA

Con las primeras luces del día, una quincena de autobuses y numerosos coches particulares partieron desde distintos puntos de la provincia. "Desde el Jiloca hemos venido diez autocares por lo menos", aseguraba un vecino de Odón. "Y si no han venido más es porque no hemos encontrado libres para alquilarlos", añadía otro. Ambos se declararon "indignados" con la "discriminación" que sufren. Se quejan de que, en la negociación de la PAC para el periodo 2015-2020, la Comisión Europea dejó "un margen brutal" a los estados miembros para que repartieran los fondos, por lo que "si no se cambian los mapas es porque no hay voluntad política de hacerlo", afirmó José Manuel Roche (UPA). Roberto Sanz (UAGA) calificó la situación como "un insulto y un atropello" al sector agrario de Teruel, de cuya desaparición avisó porque el 40% de los ingresos de muchas explotaciones proceden de estas ayudas comunitarias, mientras que José Manuel Cebollada (Asaja) instó a la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, a "repartir mejor el dinero que ya tenemos, porque no te pedimos más".

El titular del departamento, Modesto Lobón, fue la diana de las críticas: se le acusó de "representar solo los intereses de Zaragoza y Huesca", de "echar balones fuera culpando a Bruselas" de prohibir las modificaciones --cuando, aseguran, Madrid y Extremadura lo han hecho-- y de tener "poca clase política". El encargado de leer el manifiesto conjunto fue el director general de Caja Rural de Teruel, José Antonio Pérez Cebrián, para quien, dijo, es "un placer" apoyar esta causa. "Nos sentimos engañados por la postura cobarde España y unos políticos de sillón con intereses caciquiles. Queremos dignidad y justicia, no limosnas", sentenció. Por su parte, el presidente de los empresarios turolenses, Carlos Mor, señaló que el sector agrario "es la base fundamental del desarrollo económico de la provincia" y pidió a Rudi y a Lobón "que muestren un cariño especial y real con Teruel para que nuestros hijos y nietos tengan un futuro prometedor".

Las organizaciones agrarias insisten en que se está "a tiempo" de cambiar los mapas, ya que queda una semana para que se publiquen los reales decretos de la nueva PAC en el Consejo de Ministros del próximo viernes. Ese mismo día se celebrará otra manifestación por la calles de la capital turolense y "si hace falta, iremos a Madrid y a Bruselas". Porque, defienden, "por fin es la hora de Teruel".