Después de dejar atrás las pérdidas de los años más duros de la crisis, Seat sigue aumentando sus beneficios pero quiere dar un salto en su rentabilidad gracias a la nueva marca Cupra. Las versiones deportivas se independizarán a partir de final de este año con el lanzamiento al mercado de un Cupra Ateca de 300 caballos a partir de un precio básico de 43.000 euros.

El nuevo modelo será el más caro que haya puesto a la venta Seat en toda su historia, con la excepción de los vehículos de competición, y muestra el camino de la filial de Volkswagen para buscar un nuevo cliente de 40 a 50 años de alto poder adquisitivo pero que no necesite comprar una marca 'premium' para aparentar su estatus social. Así lo ha explicado el vicepresidente comercial de Seat, Wayne Griffiths, en la presentación del Cupra Ateca en el Salón del Automóvil de Ginebra, que es la primera piedra de la nueva estrategia de la marca de expandir su gama de productos y sus clientes hasta acercarse a los coches de Audi y de otros fabricantes del segmento 'premium'.

¿Habrá clientes dispuestos a pagar 43.000 euros o más por las versiones de Seat con marca Cupra? El presidente de la firma, Luca de Meo, cree que sí y trabaja con una estimación de ventas de unas 20.000 unidades iniciales, lo que supone doblar los 10.000 coches del modelo León Cupra comercializados en el 2017 con unos precios que se acercaban a los 40.000 euros. Pero la aspiración de Seat es que la nueva marca Cupra represente el 10% de todas las ventas de la firma, lo que equivale en estos momentos a más de 40.000 vehículos. En algunos mercados como Alemania y Suiza, las versiones de Cupra llegan incluso a un 20%.

Rentabilidad de los concesionarios

Las ventas de Cupra ayudarán a mejorar la rentabilidad de Seat y de los concesionarios de la marca, que en su gran mayoría registran resultados positivos y se han fijado como meta conseguir un margen de beneficio del 2% sobre la facturación, según ha explicado a este diario Griffiths. El grupo cuenta actualmente con unos 1.700 puntos de venta en todos los mercados en los que está presente, a los que recientemente se ha sumado Nueva Zelanda. En los dos primeros meses del 2018, las ventas globales de Seat se han disparado un 23,1%.

Al mismo tiempo que Seat presenta un coche de 300 caballos, también ha llevado al Salón de Ginebra un prototipo de vehículo de carreras completamente eléctrico y que alcanza los 100 kilómetros por hora en tan solo 3,2 segundos. "Será nuestra inspiración para futuros coches eléctricos y nos da un punto de vista sobre cómo vamos a interpretar nosotros la electrificación. Si la gente lo ve aburrido vamos mal y por eso hacemos un coche de competición eléctrico", ha afirmado De Meo, que ha ratifivado los planes de la marca de lanzar al mercado su primer turismo propulsado por baterías en el 2020.

Seat sigue los pasos de muchos de los fabricantes presentes en Ginebra, que combinan los bólidos de diésel y gasolina con deportivos, utilitarios y otro tipo de vehículos eléctricos con los que hacen frente al cerco creciente en varias ciudades a los motores convencionales